Elena Ayala, madre de tres, habitante de la comunidad rural El Pie en Santiago de Querétaro, lucha por mantener las lágrimas mientras confiesa:
Cuando llegó la pandemia a México y al estado trajo consigo afectaciones económicas aún incalculables. Autlán de Navarro no ha sido la excepción. Algunos comerciantes comenzaron a bajar cortinas que ya no volvieron a abrir.