El Grullo, Jalisco.- Del 28 al 30 de noviembre pasado, un colectivo independiente hizo posible una Intervención Multidisciplinaria de las Artes (IMA), en el jardín principal de El Grullo, con música, danza, literatura, arte plástico, fotografía, performance, cine y un espacio para niños y niñas. A decir de uno de los participantes, escritor, gestor cultural y promotor de la literatura tomatlense, Víctor Hugo Santamaría Orozco, lo que hace IMA es hermoso, porque lleva cultura alternativa a un lugar donde no hay una oferta permanente.
El escritor compartió que en zonas como en el municipio de El Grullo sí existen espacios destinados para actividades culturales, pero no están activos todo el tiempo y además no todas las personas encuentran su lugar dentro de la oferta existente.
Hay voces que en ocasiones señalan que a la gente no le interesa el arte y la cultura o que las manifestaciones artísticas son solo para personas de determinado estatus social, pero esto tampoco es así.
“Creo que a todos nos interesa la cultura, pero depende mucho de la oferta de cultura que tengamos, si tenemos una oferta limitada a esa van a acceder las personas, pero si existe una más variada van a poder escoger”, agregó Víctor Santamaría.
Es posible que al comienzo las personas prefieran las manifestaciones culturales que ya conocen, lo que siempre han visto, pero cuando ven otras propuestas nuevas, empiezan a probarlas, vivirlas y después a compartirlas, expresarlas y comunicarlas, según Víctor Hugo ese es el momento en que ocurren en las personas procesos de transformación y de mayor apertura.
Por otro lado, un espacio como IMA resulta fundamental para los artistas, que tienen en todo momento la necesidad de comunicar y compartir sus creaciones, lo mismo para tres personas que para 50 o más, dijo el autor.
En la literatura hay “voces que nos enriquecen”
Para el escritor Víctor Hugo Santamaría, entre más contacto tienen las personas con el arte, en este caso con la literatura -pero pasa con cualquiera de ellas- mientras más leas vas a conocer más universos, mentes, maneras de abordar los problemas, de ver las cosas, experiencias de otros.
“Que nos vayamos enriqueciendo y tengamos cómo encontrar entre todos nuestra propia solución… pero mientras mayor oferta tengas respecto a productos culturales, mejores soluciones vas a encontrar, eso es básico”, agregó Víctor Santamaría.
Desde su perspectiva, la organización de actividades culturales independientes de los municipios tiene mucho mérito, porque la oferta artística en las capitales y las grandes ciudades es constante y accesible, tanto en lo oficial como en lo independiente.
Sin embargo, desde los municipios y más los alejados de las capitales, hacer posibles festivales o intervenciones implica más esfuerzo.
Víctor Hugo Santamaría señaló, que le sorprendió ver que en El Grullo hay una iniciativa privada que colabora y que está interesada en regresarle a la comunidad algo de lo que recibe y eso resulta interesante.
Para IMA que convoca artistas de la toda la región y la capital del estado, ahora uno de los retos será vincularse con otras regiones del estado o incluso otros estados del país, para crear una red donde los artistas tengan la posibilidad de mostrar sus creaciones en espacios alternativos como este.
Escribir ordena las ideas y la vida
El escritor participó en el Foro Literario de IMA, presentando su libro “Conjuro para Viajar a USA sin Visar Pasaporte” y también impartiendo el taller “La Página Blanca VS La Escaleta: rudos contra técnicos, a dos de tres caídas sin límite de tiempo”, donde uno de los objetivos principales es propiciar la escritura a través de la escaleta (es decir una historia con un comienzo, un nudo y un desenlace).
A través de ese taller que han impartido desde el 2015 en tantos espacios como ha sido posible, a personas de distintas edades, Víctor Hugo y quienes colaboran con él han podido ver la fuerza de la escritura para genera vínculos, para permitir la comunicación entre las personas.
Específicamente la práctica de la escaleta como un método de escritura es un aprendizaje que ayuda no sólo a crear una historia, sino también a ordenar las ideas y la propia vida. En el caso de la experiencia en El Grullo fue muy fugaz, sin embargo quedó el compromiso con quienes participaron en el taller de dar seguimiento a lo que ahí comenzaron a través de correo electrónico o cualquier otro medio digital.
