Tecolotlán, Jalisco.-El Organismo Público Descentralizado (OPD) Sierra de Quila, busca cerrarle el paso lo más posible a la tala clandestina de madera en la sierra. Aunque no es una tarea sencilla, buscarán a través de un trabajo coordinado con los ejidos y pidiendo a la ciudadanía que si llegan a ver madera en movimiento, lo denuncien inmediatamente, dijo en entrevista para Letra Fría, el director de este organismo Marduk Cruz Bustamante.
Agregó que principalmente en los últimos tres años, el OPD ha registrado varias situaciones puntuales de tala clandestina que han denunciado a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA).
Aunque sí han ocurrido talas clandestinas en predios propiedad de los ejidos, Marduk Cruz dijo que en la mayoría de los casos, estos eventos suceden en terrenos de particulares, donde desafortunadamente los dueños no están presentes, no tienen interés alguno por el área natural y no cuentan con programa de manejo maderable.
¿Quiénes tienen propiedad en la Sierra de Quila?
El OPD Sierra de Quila, desconoce el número total de particulares que tienen algún terreno como parte de esta Área de Protección de Flora y Fauna, inclusive los mismos ejidatarios muchas veces desconocen quiénes son los propietarios de determinados terrenos.
Marduk Cruz comentó en la entrevista, que por parte del organismo están indagando con las autoridades municipales y estatales esta información. Del territorio total del área protegida, alrededor del 65 al 70 por ciento es propiedad ejidal y el resto le pertenece a particulares.
“El OPD lo que está buscando es intentar ubicar a la totalidad de los propietarios particulares, sin embargo hay ocasiones en las que incluso los propios dueños no quieren ser encontrados, la gente no quiere decir quiénes son o hay espacios que están en proceso de litigio, personas que se adueñan de los predios porque son de alguien que ya falleció, que está en Estados Unidos o que viven en otras zonas distantes y no vienen a ver su propiedad”, explicó el funcionario.
Invitan a la población a denunciar
A través de un video en Facebook, el OPD hizo un llamado a la población para que a través de redes sociales o en la oficina del organismo, la personas les hagan saber si ven algún camión con madera, para que ellos puedan rastrear la información y determinar si es de origen legítimo o no.
En el caso de los terrenos de propiedad ejidal, hablaron con los ejidatarios para solicitarles que le pongan algún distintivo a los camiones con madera que ingresen a su territorio con los permisos debidos.
El funcionario agregó que hay dos formas de saber que la madera es legítima: una, que cuente con un Programa de manejo maderable o con un permiso de saneamiento forestal, que es el que se hace cuando hay árboles que tienen plaga y es necesario cortarlos para proteger al bosque.
“Un camión que no te presente papeles, ningún permiso, ninguna guía obviamente te deja pensando el asunto, de dónde viene, hacia dónde va o quién lo está promoviendo”, agregó Marduk Cruz.
El OPD Sierra de Quila, no tiene la facultad para detener a una persona por sospecha de tala clandestina, ellos solamente pueden apelar a la voluntad de los conductores de los camiones para pedirles que se detengan y hacer una revisión. La única autoridad facultada para detenerlos es la Fiscalía General de la República (FGR) o la Guardia Nacional, porque la extracción de manera de manera ilegal es un delito federal.
La acción de intentar detener los camiones conlleva su riesgo, porque los choferes pueden no detenerse o incluso violentar verbal o físicamente al personal del OPD. En estos casos lo más que pueden hacer es tomar fotografías, hacer una investigación interna, hablar con los ejidatarios, con la gente de la zona y realizar la denuncia a la autoridad competente.
Efectos de la tala clandestina
El titular de la OPD Sierra de Quila, detalló al menos cuatro efectos perjudiciales que trae consigo la práctica de la tala clandestina:
- Al no existir un aprovechamiento apegado a un programa de manejo, se extraen árboles que tienen mayor diámetro y comercialmente más atractivos. Esto implica que para llegar a ellos, abren brechas, destruyen vegetación, arbustos, árboles de alrededor; hacen la extracción sin cuidado alguno y con la mayor rapidez posible, para evitar ser sorprendidos por las autoridades.
- En la extracción dejan mucho material combustible: ramas, trozas, troncos que se van acumulando sin un manejo adecuado, no lo acomodan y esta acumulación incrementa los riesgos de daño en la zona al momento de un incendio forestal.
- Generan incendios forestales porque al querer extraer la madera, buscan métodos por ejemplo quemar pequeñas áreas donde estorban algunos árboles o vegetación que no son de interés. Así ocurrió en el año 2023 donde uno de los incendios ocurridos que afectó alrededor de 700 hectáreas, detectaron que inició en un campamento clandestino. En ese caso PROFEPA clausuró el predio y hasta el momento hay algunas partes de ese bosque dañado que recién empiezan a regenerarse y otras que aún no.
- Propicia un círculo de movimiento de madera ilegal, donde muchas veces el consumidor final ni siquiera tiene idea del origen de la materia prima con la que elaboraron los muebles o tablas que compró.