En plena pandemia por el COVID-19, las jornaleras agrícolas y sus familias continúan trabajando y sufriendo violaciones a sus derechos humanos, laborales y de salud; así lo afirmó, a través de un comunicado, el Centro de Derechos Humanos de la Montaña, Tlachinollan.
Marco Antonio Paéz camina a través de un tapete fulgurante de botones naranjas. Hay tantas nubes que los colores pintan gris, pero las flores no dejan de resplandecer, como si brillaran por sí mismas. Desde hace varios años, Marco Antonio cultiva cempasúchiles
Aunque en Jalisco se realizan inspecciones en los campos agrícolas, hay fallas en el combate a la trata de personas en estos espacios laborales.