El 2 de junio de 2019 sigue marcado en San Gabriel. Las huellas de aquel desastre siguen vivas y la justicia no se ha hecho presente. La tarde de hace exactamente un año, la población fue sorprendida por una inundación de lodo
Día uno después de la tragedia.
A pesar de que los rayos del sol se negaron a salir por la mañana, el clima característico de San Gabriel no se perdió. El calor predominó.