Autlán de Navarro, Jalisco.- Para el macrosimulacro del pasado 19 de septiembre en la región Sierra de Amula, se duplicó el número de viviendas registradas en comparación con abril de este mismo año, pasaron de 110 viviendas (abril) a 242 viviendas (septiembre), según dijo en entrevista el comandante de la Base regional El Grullo de la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos Jalisco (UEPCBJ), Junior Ventura Moya.
De acuerdo a los datos de la plataforma estatal de registro, durante el macrosimulacro del pasado 29 de abril en la región tuvieron un registro de 658 inmuebles y 86 mil 520 personas participantes; en esta ocasión para el 19 de septiembre se registraron 722 inmuebles y 97 mil 677 personas.
“Principalmente por la cooperación municipal y estatal, hay que reconocer que los municipios estuvieron activos, tuvimos buenas participaciones, estuvimos con ellos trabajando dándoles los cortes de cómo iban sus incrementos (en el registro)”, agregó el comandante Junior Ventura.
También expresó que afortunadamente la población en general está más familiarizada con las estrategias de protección civil.
Uno de los aspectos importantes que la Unidad de Protección ha buscado fomentar a través de las autoridades municipales, es que las personas identifiquen los lugares de riesgo o con mayor vulnerabilidad en su entorno, esto sirve para hacer el simulacro más efectivo
“Que cuando hagan una evacuación sepan porqué van a evacuar, que conozcan la ruta de evacuación próxima, cercana y que donde se encuentren sea un lugar seguro de menor riesgo”, agregó el comandante.
También ayuda mucho generar la conciencia de participación, compartiendo con la ciudadanía que esta es una zona con altos niveles de incidencia en sismos y fenómenos hidrometeorológicos como huracanes, lluvias torrenciales; y lo que se busca es reducir daños a personas e inmuebles e incluso el ecosistema.
Algunos aspectos fundamentales a considerar en el macrosimulacro
Como parte del ejercicio del macrosimulacro por parte de Protección Civil, evalúan el tiempo que les lleva desalojar, involucrar a la totalidad de las personas en los edificios públicos y en las escuelas y no sólo hacer el ejercicio con áreas de menor operatividad y que las rutas de evacuación sean efectivamente seguras.
“Tenemos visualizado cuando hacen su salida de emergencia que tenemos algunos obstáculos, botes de basura, algunas macetas con plantas, dispensarios colocados, buscamos que todo sea de una forma más eficiente para que cumplan con sus simulacros”, comentó Junior Ventura.
En algunas instituciones, cada año actualizan sus ejercicios en el simulacro incluyendo situaciones de personas heridas, atención de algún incendio, rescate de alguna persona, conteo efectivo de la población, tanto de visitantes como personas de planta, sin embargo estos procesos muchas veces se omiten y es importante que sí se realicen.
La importancia de realizar estos ejercicios extras, es que ayudan a medir las capacidades de las personas involucradas para estar preparados para una emergencia en caso de que la tengan, también sirve para que visualicen si les hace falta equipo, herramientas o algún tipo de apoyo.
“Cuando hagan su simulacro, la parte de evaluación de daños que viene dentro del simulacro de gabinete y dentro del mismo ejercicio, es para que aprovechen ese momento para ver qué áreas de oportunidad tienen, para si es posible hacer alguna modificación de cierta estructura que permita una evacuación eficiente y oportuna”, agregó Junior Ventura.
Porque pasa en muchos edificios, que tienen puertas que se atoran cuando las abren, puertas que no se abren en ambos sentidos, que por las rutas donde evacúan hay plafones que están por caerse, cristalería, tomar en consideración estos detalles ayuda a reducir los accidentes en un evento real.
Incrementa participación en municipios
Según los datos de Protección Civil Estatal durante el macrosimulacro del 29 de abril destacó la participación de tres municipios en esta región: Autlán, El Grullo y Tenamaxtlán; en esta ocasión el número de municipios con mayor participación incrementó y ahora los más destacados fueron: Autlán, El Grullo, El Limón, Tonaya, Tenamaxtlán y Tuxcacuesco.
Más allá del ejercicio puntual realizado el 19 de septiembre, es importante que la población esté preparada para cualquier situación de emergencia, en el caso de esta zona especialmente para un temblor o un fenómeno hidrometeorológico.
Entre las recomendaciones de Protección Civil están las siguientes:
- Fortalecer la cultura de la prevención en familia por posibles sismos nocturnos, identificar en las viviendas áreas de menor riesgo, siempre con información de fuente oficiales.
- Mejorar los tiempos de respuesta y los protocolos de seguridad y que todas las personas durante los macrosimulacros.
- Incrementar la coordinación comunitaria e institucional, donde incluso las empresas pueden involucrarse con las comunidades que tienen cerca para generar estrategias de prevención de riesgos en conjunto.
- Elaborar un Plan Comunitario de Protección Civil, como ocurrió en la localidad de El Jalocote en Autlán, donde hicieron un breve ejercicio de simulacro de sismo y la intención es posteriormente hacer uno con la hipótesis de inundación, de ser posible hacer un ejercicio de simulacro una vez por trimestre.