Por: Jesús D. Medina García
Autlán de Navarro, Jalisco.- El pasado viernes 16 falleció en Guadalajara el dramaturgo, director, actor y maestro de teatro José Ruíz Mercado. Una lamentable pérdida para la comunidad artística jalisciense y aunque sabemos que es algo natural, no se deja de sentir cierta tristeza, nostalgia… melancolía. Ganas de llorar.
Lo conocí en la década de los 80 en los pasillos de la extinta Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Guadalajara. A Enrique Macías lo conocí en una lectura de poesía, leyó como nunca hermosos poemas, ebrio, desafiantemente amoroso.
¿Por qué relaciono al dramaturgo con el poeta? En primera instancia porque los quiero mucho y también porque fuimos parte de esa flota que hacíamos al mundillo cultural semiunderground tapatío. Y porque la última actividad que hicimos juntos se relaciona con Macías.
Ruíz Mercado tenía un programa de radio en internet y en esa ocasión durante la pandemia se iba a abordar la vida y obra de Enrique Macías. Los invitados de José fuimos la escritora Silvia Quezada en vivo y yo enlazado desde Autlán. Fue un buen programa.
La obra de José Ruíz Mercado es basta, en el prólogo de La balada de Cata y Manuel (o el plagio del río) la directora de teatro Lorena Vega escribe:
“La balada de Cata y Manuel, obra sólida desde su contexto histórico y su importancia cultural… con un tema terriblemente escabroso y cotidiano por desgracia, como lo es: la explotación humana. Desde la marginación, la pobreza y la ignorancia; resultado de la infiltración de un gobierno carente de moral y de cultura”.
La obra se estrenó en el CEDART José Clemente Orozco el 1 de julio del 2009.
De la obra “La Noche”, presentada en la Casa Teatro El Caminante, el 9 de febrero de 2009, el prestigiado Doctor Carlos Vevia comentó:
“para situarnos en una atmósfera propicia para leer este teatro de José Ruíz Mercado e imaginarlo en escena mientras leemos, quizás nos faltaría mencionar también a Pirandello con el que llegamos al desesperado nihilismo de nuestra época. Ya no podemos estar seguros de nada, ni siquiera de lo nefasto o divertido. La certidumbre nos engaña”.
La balada de Cata y Manuel, por cierto, dedicada a los habitantes de Temacapulín y su lucha por la vida, inicia así, vean la magia y el poder de la palabra de Ruíz Mercado para transformar o crear realidades:
“Totalmente oscuro. Escenario vacío. Del piso surgen mantas grises con texturas de color de diferentes espacios escénicos. Algunas semejan banderas, tanto civiles como religiosas. Todas son onduladas, ninguna es vertical. Luz tenue. Se escucha un instrumento de cuerda. Alguien lo afina. La luz va subiendo de intensidad. Vemos a los actores a contraluz. Apenas siluetas. Cada uno ejecuta alguna tarea escénica una escalera al centro. Alguno mueve las telas, otro, en la escalera central sube algún telón…Éstas y otras actividades realizan. Unos minutos antes dieron la segunda llamada. De entre el público entra una de las actrices con prisa…”
Ese era Ruíz Mercado. Miembro de la Asociación Mexicana de Investigación Teatral (1996). Parte de su obra ha sido traducida al rumano y al inglés. Colaborador de Chicome, Controversia, El Jalisciense, El Occidental, Esfera, Éxodo, Incluso, La Rana Sana, Omnibus, Péñola, Perspectiva, Semanario Cero, Semanario Diez, y Tinta. Becario del CME Salvador Novo, 1975, y del Conaculta, creador artístico, 1993. Premio INJUVE 1973. Premio Dramatúrgico U. de G. 1974. Premio de Dramaturgia del Departamento de Bellas Artes del Estado de Jalisco 1975. Premio Plural 1980. Premio a la Mejor Obra Estrenada de la Unión de Periodistas Teatrales de Jalisco por Mojado James.
En el Aula magna del CUCSUR se presentó hace unos años una obra de José y nos iba a asesorar para conformar un grupo de teatro.
Arte Antipoética
Escribir un poema
es un acto suicida
cuando no malabarismo
irresponsable de un loco.
¡Pobre de mí
que busco escribir
el anti poema de mi vida!
No son las calles
No son las calles las que duelen
sino lo que dejamos en ellas
un encuentro fortuito que determinó
toda nuestra existencia
y ya jamás fuimos los mismos…
No son las calles las que duelen
son los muertos nuestros muertos
los que no me dejan dormir
ni vivir
y a veces ni morir
Por la puerta trasera
Dije que después
de escuchar
a Juan Sebastián
bien pudiera irme
por la puerta trasera
del penal con mi muerte bien sola.
Pero resulta
que después
de escuchar a Bach
me gusta la vida mucho más.
Que el diablo
le guarde en su genio
por toda la eternidad.
El pasado jueves 8 de junio, acudí a la Biblioteca Municipal de Autlán, a donar unos libros, ya lo había comentado con las autoridades correspondientes. Estaba la maestra Tere. Y era una tarea que por diversos motivos yo había postergado. Lo que aún me tiene sorprendido, anonadado, escéptico, irónico… es que en esos libros donados iban “La Noche” y “ La balada de Cata y Manuel. ( o el plagio del río”, del dramaturgo José Ruíz Mercado quien fallecería días después en la ciudad de Guadalajara de manera inesperada, lleno de planes, proyectos.
A través de estas letras pongo a dialogar al poeta Enrique Macías y al Dramaturgo Ruíz Mercado, se la llevaban bien, bien podrían estar en el Seol, lugar donde habitan todos los muertos de acuerdo a la tradición pagano-judeocristina.