Autlán de Navarro, Jalisco.- El acceso al agua es un derecho que las autoridades deben garantizar a la ciudadanía, sin embargo las personas adquieren obligaciones que en caso de no cumplir deben ser sancionadas pensando en el bienestar social, en la preservación del recurso y no en la carrera política de los funcionarios, dijo en entrevista para Letra Fría el investigador Luis Manuel Martínez Rivera, como parte de las conclusiones del Foro intermunicipal del agua: retos y perspectivas.
Este Foro fue organizado por académicos del Centro Universitario de la Costa Sur (CUCSur) en conjunto con la Junta Intermunicipal de Medio Ambiente para la gestión integral de la cuenca baja el río Ayuquila (JIRA).
Como parte del foro realizado el pasado 16 de mayo, la abogada constitucionalista Ana Lilia Santana Villa, habló de la obligación del Estado Mexicano a proveer el agua como un derecho. De esta ponencia surgieron reflexiones en torno a la ciudadanía que no cumple con sus responsabilidades y obligaciones y cuál debería ser el actuar de la autoridad.
Los especialistas coinciden en que los gobiernos están obligados a proveer de agua potable a la población, sin embargo tenerla al acceso conlleva responsabilidades indispensables, como pagar por el servicio, eliminar las fugas dentro de las viviendas o establecimientos y cuidar el recurso.
Tanto a nivel municipal como estatal, existen reglamentos y leyes que estipulan cuáles son los derechos y obligaciones, tanto de la ciudadanía como del gobierno en torno al tema del agua.
Por ello, para los académicos esto se trata de apegarse a los reglamentos y hacerlos cumplir.
Proteger el agua más allá de los costos políticos
Luis Manuel Martínez expresó, que cuando los políticos llegan a ser autoridad, una de sus obligaciones es hacer valer lo que está en las leyes, sin contemplar los costos políticos, porque eso es pensar sólo de manera personal. La función es contemplar el beneficio colectivo.
“Esa parte nos hace falta trabajarla con los municipios, que no lo estén viendo en términos políticos, que lo estén viendo en términos del recurso agua que se tiene, que es escaso y necesita cuidarse y que cuesta bastante extraerlo y llevarlo hasta nuestras casas” agregó el especialista.
Las autoridades municipales, antes de pensar en abrir nuevas fuentes de agua (perforaciones de pozos) que resulta costoso, lo primero es resolver el tema del abasto adecuado, erradicar el desperdicio, lograr que los consumidores paguen y tener consideraciones para quien efectivamente por su situación económica no pueden pagar.
Incluso desde la academia, surgió la propuesta de colocar medidores empezando por los grandes consumidores, incluyendo las instancias de gobierno.
Campaña de concientización, sí… aunque no es suficiente
Otra de las estrategias que es indispensable argumentó Luis Manuel Martínez, es generar una campaña de cultura del agua permanente, que no requiere de una gran inversión, pero sí tiene un impacto significativo.
Sin embargo, la campaña de concientización no es suficiente, se requieren acciones concretas que incluyan las sanciones para quienes no cumplan con la parte que les corresponda.
Entre las principales recomendaciones que compartió Luis Manuel Martínez están:
- Reducir el consumo y asegurar corregir todas las fugas en las viviendas y establecimientos.
- Reglamentar que los grandes consumidores usen tecnologías de ahorro de agua en sus procesos.
- Buscar las estrategias para dar incentivos a los negocios que ahorran agua.
- Elaborar un diagnóstico basado en información actualizada y veraz de la situación actual del agua
- Implementar una redistribución del servicio de agua potable en cada uno de los municipios.