Por Red Macollo
Por: Manuel Jacobo. Foto: Redes. Publicación: 9/01/2023
El comerciante Antonio Guadalupe Vega Bernardino de 45 años de edad, fue privado de su libertad el 15 de diciembre a las 12 de la noche cuando un grupo delictivo que portaba armas de fuego lo amenazó y le pidieron salir de su domicilio.
Esto pasó en la localidad de San Antonio Tlayacapan en el municipio de Chapala. Desde ese momento no está localizado.
Antonio Guadalupe ya había sido amenazado por el grupo criminal, pues le querían obligar a vender productos ilícitos en su comercio, pero él se negó a hacerlo; pasó de amenazas a la privación de la libertad.
Toño Vega, es un comerciante comprometido con su localidad y era miembro activo de las asambleas comunitarias: “Estamos haciendo todo lo posible por encontrarlo, es una persona buena que nunca ha cometido ni fraudes ni nada, al contrario, siempre ha ayudado al pueblo” mencionó una habitante de la localidad.
Toño es conocido por sus vecinos como una persona muy seria que siempre se encontraba atendiendo en su mini súper; por un tiempo, acudió a jugar basquetbol en la playa de la localidad hasta que dejó de hacerlo.
Bernardino creció sin su padre, pues falleció cuando él tenía una edad muy corta, motivo por el cual se cambió al domicilio de su abuela y ahí fue donde él construyó su tienda, mientras que la parte frontal funge como negocio, la segunda planta de la casa sirve de hogar, sitio que compartió con su esposa e hija.
Vivo se lo llevaron, vivo lo queremos
Ante la falta de acciones de búsqueda de parte de las autoridades para dar con el paradero de Antonio Vega, los familiares y vecinos tomaron la avenida principal de Chapala, una de las principales vialidades que llevan a Jocotepec por el libramiento Chapala-Ajijic.
La inacción del Gobierno Municipal de Chapala se ha limitado a crear organismos que no funcionan y que lejos de dar solución, terminan señalando que la autoridad competente es otra, critican los vecinos.
En la manifestación, una comitiva de cinco personas ingresó con las autoridades locales, pero estas se limitó a informar que «no es su facultad la búsqueda de personas y buscarían la forma de brindar mayor seguridad en la zona», declararon.
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Ante la poca respuesta de las autoridades ante el hecho de que Toño se negó a vender productos ilícitos y lo desaparecen; sigue ilocalizado, los vecinos de San Antonio Tlayacapan decidieron llamar a una nueva movilización el 21 de diciembre:
¡Amigo te queremos de regreso!
¡Paz para San Antonio!
¡Regresen a Toño!
¡Vivo se lo llevaron, vivo lo queremos!
El pueblo unido por Toño se hizo visible con consignas, pero haciendo sonar los claxón delataban el malestar en la vialidad.
Por fin la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas en Jalisco acudieron para escuchar y tomar notas de los reclamos que hicieron los manifestantes, pero nada más. Toño sigue ilocalizado.
Dependencias municipales para búsqueda no sirven
La presencia del crimen organizado ha menguado el actuar de las autoridades de todos los niveles, pero sobre todo en el Gobierno Municipal de Chapala.
Durante la administración presidida por Moisés Alejandro Anaya Aguilar, se conformó una unidad municipal para realizar el registro de personas desaparecidas y brindar apoyo a los familiares de las víctimas.
Sin embargo, las afectadas denunciaron que dicho organismo no funcionó y nunca generó datos sobre lo que realmente pasa en el municipio.
Aunque desde el 6 de octubre de 2020 se anunció en el Diario Oficial de la Federación (DOF), un nuevo Protocolo Homologado para la Búsqueda de Personas Desaparecidas y no Localizadas, por el que los municipios adquirían nuevas obligaciones en la búsqueda de personas, el Síndico Municipal dijo: solo son buenas intenciones y no se pude realizar.
El 28 de junio de 2022 se aprobó en el cabildo municipal la conformación del Grupo de Búsqueda de Personas en Chapala.
El colectivo Guerreras Unidas de Chapala denunció la falta de integración de las familias y en medio de la exigencia por la presentación con vida de Toño, los encargados de la seguridad en el municipio se deslindaron: «no tenemos facultades para realizar este trabajo, la autoridad competente es la Fiscalía del Estado de Jalisco», contaron a este reportero.
Solo cuidan cuando va Enrique Alfaro
Las personas de la comunidad se sienten inseguras.
El mismo día que privaron de la libertad a Toño Vega, el Gobierno de Chapala anunció el inicio del operativo Guadalupe-Reyes, por el que habría la presencia de elementos de seguridad de los tres niveles de gobierno y se comprometieron.
También el 17 de diciembre que acudió el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro hubo una fuerte presencia de corporaciones de seguridad, pero se limitaron a dar un paseo en bicicleta por la ciclovía; los habitantes molestos evidenciaron la falta de seguridad haciendo notar que ellos sí andan bien cuidados:
El Jefe del Gabinete de Seguridad en el estado, Ricardo Sánchez Berumen, asistió al banderazo de inicio con una caravana de 14 camionetas de la Policía Estatal a cargo del comisario Juan Bosco Agustín Pacheco Medrano, marca RAM con alto blindaje y equipada con armamento y cinco motocicletas. El pueblo no tiene nada de eso.
La ribera no es segura para nativos ni extranjeros
Durante recientes décadas, las personas que llegaban a vivir a esta comunidad del municipio de Chapala eran extranjeros que solo buscaban tener una vejez tranquila, llena de arte e historia.
Sin embargo, desde hace unos cuatro años los grupos criminales comenzaron a controlar el territorio y han cambiando rápidamente la estructura comunitaria.
-¿Quién estará a salvo?- se preguntaba una habitante de San Antonio Tlayacapan.
Nadie le puede responder, aunque muchos habitantes han visto un repentino aumento de violencia y el consumo de estupefacientes en los jóvenes es alarmante; se suma el aumento de personas armadas que siembra «miedo e incetidumbre», afirman.
Los pueblos ribereños en el que años atrás se podía ver personas caminando o a caballo, ahora tienen un escenario distinto: se ven vehículos de lujo dejando en claro que ellos son los que imponen las normas actualmente.
Los datos contextuales
En 2021 se encontraron cuerpos desmembrados en la Agencia Municipal de Riberas del Pilar, un pequeño poblado que colinda con San Antonio Tlayacapan. En 2020 se localizó una fosa clandestina ahí mismo y se afirma que en la zona hay casas de secuestro y exterminio. Las fosas clandestinas se ubican también en Ajijic y Santa Cruz de la Soledad. El 14 de septiembre del 2022 se registró un enfrentamiento entre un grupo altamente armado y autoridades. Según el recuento del Colectivo Guerreras Unidas de Chapala, hay 200 personas desaparecidas pero ninguna autoridad se compromete con la búsqueda de sus seres queridos.
*Este es un trabajo de Perimetral, medio aliado de la Red Macollo*
