Por Pie de Página | Alianza de Medios
CIUDAD DE MÉXICO.- En una larga jornada, el Senado de la República aprobó con 70 votos a favor, 51 en contra y 1 abstención, la reforma que suscribe la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional. La Guardia Nacional se creó hace cuatro años para intervenir en tareas de seguridad pública y sería un organismo civil, como no fue así, quedó supeditado a un mando de la misma naturaleza: la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Tanto los senadores de Morena como sus partidos aliados (que en este tema incluyen al Partido del Trabajo, al Partido Verde y Encuentro Social) apresuraron la discusión en el pleno de la iniciativa que presentó el presidente López Obrador el 31 de agosto y que ya había sido aprobada por la Cámara de Diputados el pasado 3 de septiembre.
La bancada del Partido Acción Nacional quiso prorrogar sin éxito la discusión al punto de hacer un parlamento abierto al respecto.
La iniciativa de reforma pretende transferir el mando de la Guardia Nacional de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana a la Secretaría de la Defensa Nacional. Tanto el presidente como la bancada de su partido, Morena, aseguran que la propuesta no busca militarizar al país, sino promover una corporación de seguridad confiable y profesional, y que no se eche a perder como la Policía Federal, organismo de origen civil.
El viraje presidencial
Esta misma semana López Obrador reconoció que cambió de opinión respecto a la presencia del Ejército en las calles. Mientras que en sexenios anteriores fue crítico de la presencia de las Fuerzas Armadas en el país, dijo que cambió de parecer al llegar a la Presidencia y ver el problema de seguridad que le habían heredado.
*Este contenido pertenece a Pie de página, puedes leerlo completo en su página web*