La opresión criminal que ha sufrido la Sierra Tarahumara por décadas ha ocurrido bajo presencia de militares y agentes estatales. La figura de José Noriel Portillo, el Chueco, presunto responsable de la muerte de los sacerdotes jesuitas, es una muestra del hilo
Durante estos días, no sin antecedentes previos, los mexicanos hemos sido testigos mediáticos de linchamientos o reacciones violentas contra presuntos delincuentes. Hay varios aspectos que reflexionar al respecto, pero espero que sea de absoluta obviedad indicar que tales sucesos manifiestan una realidad
Las décadas recientes podrían ser descritas con el lema de “todo se vale, con tal de que ganes dinero”. Puede sonar a generalización, pero no es difícil coincidir en esa etiqueta que la época se ha ganado a pulso.