Autlán de Navarro, Jalisco.- Según datos de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) hasta la semana epidemiológica 13 de 2025, en Jalisco registraron 9 mil 320 casos de picaduras de alacrán; los municipios con mayor incidencia son Tomatlán, Guadalajara y Zapopan, de acuerdo a un comunicado.
Para disminuir la incidencia de estas picaduras, las autoridades de salud hacen un llamado a la población para tomar medidas de prevención y en caso de que ocurra acudir de manera inmediata al centro de salud más cercano, para que les apliquen el antídoto faboterápico.
Los primeros 30 minutos posteriores a la picadura de un alacrán venenoso son clave para una atención efectiva, ya que el efecto puede causar solo dolor o llegar a complicaciones que pongan en riesgo la vida.
Los alacranes suelen picar durante la noche al interior de las viviendas.
En el estado se estima que existen 15 especies distintas de alacrán, de las cuales solo cinco representan un peligro para los seres humanos.
Entre las medidas preventivas recomendadas para la población:
- Usar guardapolvos y mosquiteros para evitar que los alacranes entren a la vivienda.
- Revisar grietas y hoyos en las viviendas y sellarlos.
- Podar ramas en contacto con la casa y retirar la hierba crecida.
- Evitar la acumulación de materiales de construcción, madera u objetos similares cerca del hogar.
- Sacudir las prendas antes de usarlas y asegurar que la ropa de cama no toque el piso ni las paredes.
- Y en las zonas rurales, pueden colocar latas en las patas de las camas.
En caso de una picadura de alacrán
Si llega a ocurrir una picadura, el principal síntoma es un dolor intenso en el área afectada, si el alacrán no es venenoso, el malestar puede limitarse a dolor, hinchazón, enrojecimiento y adormecimiento local.
En caso de que la picadura sea de una especie peligrosa, los síntomas pueden incluir fiebre, dolor generalizado, escurrimiento nasal, lagrimeo y dificultad para respirar.
En caso de desconocer cuál es la unidad de salud más cercana, las personas pueden comunicarse al teléfono 333-823-3220.
La recomendación de la autoridad es evitar el uso de remedios caseros, no aplicar hielo ni succionar el veneno, y reportar al personal médico cualquier sustancia ingerida de manera previa.
