El general Marcelino García Barragán no es un personaje al que fácilmente podamos relacionar con asuntos universitarios, como no sea, y de manera por demás negativa, con su papel frente al movimiento estudiantil de 1968.
Sin embargo, el oriundo de Pueblo Nuevo, hoy Cuautitlán de García Barragán, figura en la historia moderna de la Universidad de Guadalajara como el primer gobernador de Jalisco que presidió una sesión de su Consejo Universitario.
Este curioso acontecimiento ocurrió el 22 de marzo de 1944, fecha en que el dicho Consejo celebró una sesión extraordinaria para atender un asunto no demasiado vital para el devenir de la Universidad pero que nos permite conocer el grado de control que sobre ella tenía el gobernador del Estado: se trataba de la revalidación de los estudios que dos alumnos cursaron durante un par de años en la carrera de Medicina de la Universidad Autónoma de Guadalajara y que el general tenía especial interés en que fuera aprobada por el Consejo.
La sesión
La sesión no solo fue presidida por el general Barragán, sino también convocada por él y, por si fuera poco, se celebró en su despacho. Es decir, hizo acudir a su oficina al pleno del Consejo Universitario; el rector de la Universidad de Guadalajara, Ignacio Jacobo, fungió como secretario y abrió la sesión exponiendo a los consejeros que el gobernador García Barragán estaba enterado de que la decisión que él tomó de revalidar los estudios que habían cursado los alumnos Guillermo Baeza Rodríguez y Honorio Peña Michel en la Universidad Autónoma de Guadalajara habían causado malestar en el Consejo Universitario por no haber tenido en cuenta la negativa a dicha revalidación que ya el CGU había determinado.
El general expuso, por medio del secretario, a los consejeros que siempre estaría abierto a tomar en cuenta sus opiniones, por lo que los invitó a que fijaran las bases definitivas del proceso de revalidación de estudios de los alumnos procedentes de la Autónoma, que él mismo tomaría en cuenta en las ocasiones en que tuviera que acordar algún trámite de este tipo. También pidió a los consejeros que estudiaran a fondo los casos de los estudiantes ya mencionados, buscando hacer respetar la autoridad que correspondía a los acuerdos del gobernador, sin menoscabar los intereses universitarios.
Acuerdo
Al final, se acordó que los consejeros presentarían un estudio para determinar las bases para la revalidación de estudios de alumnos procedentes de la Autónoma, para presentarla al Congreso para su aprobación, en su caso, y posteriormente hacerla llegar al gobernador.
Los alumnos Baeza y Peña, según se acordó en la sesión, obtuvieron la revalidación de sus estudios de dos años en la carrera de Medicina en la Autónoma de Guadalajara, como había acordado el gobernador anteriormente. Según el resumen del acta de esta sesión que publicó la Enciclopedia de la Universidad de Guadalajara, el gobernador agradeció a los consejeros universitarios su disposición para acudir a sesionar en su despacho.
En el periodo de gobierno del general Marcelino García Barragán (1943-1947) la Universidad de Guadalajara dependía del Poder Ejecutivo del Estado, que no solamente aportaba parte del presupuesto universitario, sino que también intervenía en la revisión de sus planes de estudio.
Fuentes:
- Quezada Camberos, Silvia. El Seminario de Cultura Mexicana en Guadalajara. Apuntes para su historia. Seminario de Cultura Mexicana, corresponsalía Guadalajara, 2021. Pág. 57.
- Memoria del Poder Ejecutivo del Estado de Jalisco, 1943-1947. Artes Gráficas, SA, Guadalajara, 1947.
- Sesión extraordinaria del Consejo Universitario del 22 de marzo de 1944, en la Enciclopedia de la Universidad de Guadalajara, tomo cuarto, la Universidad de Guadalajara, 1925-2017.
