Por: Jade Ramírez | Perimetral
Nayarit. 05 de marzo de 2023. (Letra Fría) Alrededor de las tres de la tarde del domingo 5 de marzo 2023, la voz de Santos de la Cruz Carrillo, comunero wixárika de Bancos de San Hipólito, Mezquital, Durango lanzaba un mensaje a aliados, abogados y comuneros por comunicación privada.
Anunciaba que iba de vuelta a su comunidad en un operativo a cargo de la Fiscalía del Estado de Nayarit, que incluía ambulancia, policía estatal y se sumaría la Guardia Nacional.
«Que tal compañeros y compañeras, después de atender todo el asunto protocolarios, después de los servicios medicos y psicológicos, y que levanté la declarcion correspondiente me pasaron a la Cruz Roja; ya vamos en camino saliendo de Tepic», contó.
Se dirigía a Jesús María del Nayar rumbo El Pastor, donde familiares y comunidad tenían un bloqueo en la carretera Ruíz-Zacatecas, en exigencia de su localización y presentación con vida.
¿Desaparición forzada?
El relato de la comunidad de Bancos Calitique Mezquital Durango, es que Santos de la Cruz Carrillo estaba con su familia, Carlota Aguilar Parra madre de sus hijos Henry y Paulo, digiriéndose en una camioneta de Jesús María El Nayar a Bancos de San Hipólito, el viernes 3 de marzo de 2023.
Al medio día, entre las 12 y una de la tarde, se dejó de saber de ellos. Su teléfono mandaba a buzón.
Desde el primer momento que se decidió comunicar a medios y aliados, tanto las autoridades agrarias, tradicionales como el Congreso Nacional Indígena, se ostentaba la desaparición del activista y comunero quien ha sido clave para concluir la restitución de territorio en litigio.
Precisamente entre el 20 y 23 de febrero de este año, seguían los trabajos de ejecución de sentencia del juicio agrario 037/2011, dictada por el Tribunal Unitario Agrario del distrito 7 en la ciudad de Durango.
Se trata de la restitución legalmente de casi 11 mil hectáreas, producto de la lucha de décadas de la comunidad autónoma de Uweni Muyewe.
Fiscalía de Nayarit explica poco
Aunque se celebra la localización con vida de Santos de la Cruz, resta que las autoridades tanto de Durango como Nayarit, explique cómo fue localizado, dónde, si respondió a un operativo y el origen de la desaparición.
A esto se suma que en los recientes cinco años nada cesa el acoso a wixaritari organizados en la defensa de su territorio, por la invasión de narco, ganaderos y encargados de monocultivo, amapola o laboratorios clandestinos.
En El Mezquital, Durango, se ha registrado el desplazamiento forzado de familias completas por razones de violencia.
Las denuncias por balaceras, retenes de grupos armados e incursión en comunidades de la delicuencia organizada no solo fabricando terror psicológico, sino cometiendo violaciones graves a los derechos humanos, en lugar de disminuir, se multiplican.
Durango
La Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, informa de manera anual, la situación de desplazamiento forzado interno estrictamente por razones de violencia de alto impacto.
En el informe de 2021 se contabilizan 67 personas desplazadas solo en El Mezquital, Durango, pero el acumulado en México son 379 mil 322 personas.
Apenas el 23 de enero de este año inició el Plan de Justicia Wixárika, Náayeri, O’dam y Mexikan, por el que el Gobierno Federal a cargo de la Cuarta Transformación, inició mesas de trabajo y operativos interinstitucionales para la «unidad y reconciliación de los pueblos», expresó Adelfo Regino Montes titular del Institito Nacional de Pueblos Indígenas en la administración de Andrés Manuel López Obrador.
Pero, además de la «reconciliación» de los pueblos, ¿Cuándo su liberación del yugo criminal que gana terreno entre Durango, Nayarit, Jalisco y Zacatecas?
Este contenido fue publicado en Perimetral, medio integrante de Macollo, la Red de Medios Independientes de Jalisco.
