“Allá hallarás mi querencia. El lugar que yo quise. Donde los sueños me enflaquecieron.
Mi pueblo, levantado sobre la llanura.
Lleno de árboles y de hojas, como una alcancía donde hemos guardado nuestros recuerdos.
Sentirás que allí uno quisiera vivir para la eternidad”.
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Rulfo, Juan. “Pedro Páramo”, Colección Popular,
Fondo de Cultura Económica, México, D. F.,
Novena reimpresión, 1993, pág. 75.
El 1° de septiembre de 1994, fui nombrado Cronista Municipal de San Gabriel, Jalisco, por don Luis Reyes Rodríguez, entonces Presidente Municipal de dicho municipio, y propuesto al Cabildo por la Maestra Ma. Dolores Castañeda Villalvazo, regidora de Educación y Cultura por el período 1992-1995.
Al mismo tiempo, me hice cargo del resguardo y preservación del Archivo Histórico Municipal, y posteriormente adscrito y reconocido por el Archivo General de la Nación con el Código MX-14-113-AHMSG, de fecha 17 de julio de 2009.
Han pasado 30 años de aquella primera fecha, y como dijo la canción de Armando Manzanero “… parece que fue ayer…”.
Ser cronista municipal no es fácil
Un cronista, historiador o investigador no se hace de un día para otro; hay que leer mucho, escribir, escribir y volver a escribir, publicar, equivocarte, reconocer fallas y enmendar tus propios escritos, tener mucho cariño por la tierra de residencia o que nos vio nacer. No es solo ocupar una silla en la Casa de la Cultura, y estar en la nómina, hay que desquitar o muy poco que se remunera; hay que invertir, tiempo, dinero y esfuerzo. Desgastarte los ojos y, a veces, descuidar a la familia.
Desde siempre mi voluntad no ha decaído, en lo más mínimo, para convertirme en uno de los muchos gabrielenses dedicados a preservar la memoria histórica del municipio.
Y digo que “… en uno de los muchos gabrielenses” porque me han precedido en este renglón personajes como don Enrique Trujillo, Raúl Rivera Bernal, Gabriel Ch. Morett, Luis Zepeda Castañeda, Mons. Federico Richter, Pablo Velarde Magaña, el Presbítero Enrique de Jesús Ochoa Díaz-Santana, entre otros.
Soy el Cronista municipal del pueblo y municipio de San Gabriel desde 1994, fecha en que la Autoridad Municipal me otorgó el primer nombramiento.
A partir de ese año, adquirí un compromiso formal con los habitantes de mi municipio y conmigo mismo. Responsabilidad que he tratado de cumplir de manera puntual en las tareas que me he propuesto y en aquéllas que me han pedido las diversas autoridades municipales en turno.
Aun cuando el gobierno actual prescindió de mis servicios, ya que me dijo un profesor “… en estos tres años trabajaremos sin cronista”, mi trabajo no ha cesado, por el contrario.
El valor de la crónica
En 2021 publiqué con el patrocinio de Miguel Ángel López Gómez, la obra monográfica “Mi Querido San Gabriel”, con edición de 1000 ejemplares; en 2022 se publicó la obra de genealogía “El corazón de la familia Jiménez Gallardo”, por encargo especial de dicha familia.
Afirmo que a Crónica Municipal, es la descripción de acontecimientos históricos en los que se observa el orden de los tiempos, es la narración de los hechos históricos más significativos de la vida municipal de cada una de las células básicas de la organización política en los estados.
El oficio sagrado del cronista no admite misterios, es un oficio sencillo y claro, delimitado por la historia municipal y lo que éste escriba para los suyos.
Debe actuar respetuosamente según las costumbres de la comunidad.
La crónica cuando es difundida por todos los rincones del municipio logra que los habitantes se identifiquen con el territorio y los acontecimientos cotidianos; es un mecanismo de rescate de la identidad municipal.
Creo firmemente que la crónica es una acción que deben fomentar cada uno de los municipios de Jalisco, para ello es necesario que se nombre a una o varias personas que se dediquen a este noble oficio.
Se debe proponer por lo menos a una persona preparada en el ejercicio de escribir crónica y que sea conocedora profunda de su municipio, no es necesario que sea historiador, sólo debe considerarse que tenga arraigo en la comunidad y el deseo de transmitir por escrito o por las redes sociales todo lo que se sabe y se ve desde la actuación histórica del municipio.
Los deberes de un cronista
Dentro de mis deberes como cronista está el de emitir mi opinión y evaluar consultas sobre aquellos temas relacionados con la historia de San Gabriel, o con los que la Autoridad Municipal, estime oportuno.
Es de suma importancia redactar una memoria anual en la que se recojan los principales acontecimientos sociales, culturales, políticos y de todo tipo relacionados con la comunidad.
Se debe participar de manera coordinada con la Dirección General de Cultura, de Turismo, de Educación, y de Comunicación Social, así como en el intercambio educativo cultural con otras ciudades, tanto a nivel nacional como internacional.
Dentro de mis funciones cotidianas procuro siempre desarrollar escritos referentes a la vida e historia de la comunidad.
Presenciar y consignar por escrito los acontecimientos importantes de mi región; (llevo una Bitácora desde 2009); también se debe realizar y actualizar la monografía municipal con el objeto de crear una conciencia histórica entre los ciudadanos de la localidad.
Fomentar todo tipo de eventos culturales, conciertos, conferencias, presentación de algún libro, a través de acciones concretas para conocer la realidad de la comunidad; mantener vivas las tradiciones y costumbres, las fechas memorables, los hechos históricos desarrollados en la comunidad, y todo aquello que eleve el nivel cultural del municipio.
Ser asesor y fuente de información histórica para todos los ciudadanos e investigadores que lo soliciten, hoy día me visitan profesionistas, investigadores, literatos, jóvenes de universidades, de preparatoria, secundaria y alumnos de primaria.
Me he convertido en promotor de la conciencia histórica, de la Heráldica Municipal considerando que el municipio, la ciudad y las comunidades cuenten con un escudo propio representativo.
Soy miembro activo desde 1996 de la Asociación de Cronistas Municipales del Estado de Jalisco.
Para culminar con la relación de las más recientes publicaciones, debo citar:
- El corazón de la familia Gómez, publicada en forma independiente en 2023.
- Los Guzmán, una familia del sur de Jalisco, (homenaje a mi padre Antonio Guzmán Muños) tercera edición, julio de 2023.
- Árbol genealógico del linaje Sotomayor, en coautoría de Javier Soto Gallardo, con edición, revisión y corrección de José de Jesús Guzmán Mora; julio de 2023.
- En enero de 2024, presenté Evolución de la educación primaria en San Gabriel, Jalisco, 1814-1876, en el marco del bicentenario del nacimiento oficial del Estado de Jalisco, auspiciada por la Fundación Humvascular Além, encabezada por el Dr. Guillermo R. Aguilar Peralta y el cobijo del Capítulo Sur de la BSGEEJ, A. C.
- Obra: Antigua nota de color referente a la Villa de San Gabriel, Jalisco, y la obra más reciente Los Mezquites, identificación de individuos registrados en el Padrón Parroquial de 1817 de San Gabriel, Jalisco, ambas en coautoría con José Luis Rivera González, impresas en mayo de 2024.
Escribo desde 2022 para el Periódico Digital Letra Fría de Autlán, para el Diario El Volcán de Zapotlán el Grande desde 2023, y participo en La Hora Nacional en la radio nacional.
Por otra parte hoy en día estoy preparando La misión cultural del Capítulo Sur, 1985-2025, para celebrar los primeros 40 años de dicho Capítulo fundado en Sayula, Jalisco y perteneciente a la Benemérita Sociedad de Geografía y Estadística del Estado de Jalisco, A. C. institución a la que pertenezco desde 2016.
Hay una treintena de proyectos sin publicarse.
¡Es cuánto, que tengan buen día!
