Por: Carmen Aggi Cabrera
Autlán de Navarro, Jalisco. 23 de noviembre del 2020. (Letra Fría).- Este domingo en la ciudad de León, Guanajuato, falleció el obispo emérito de la Diócesis de Autlán, Monseñor Gonzalo Galván Castillo.
Galván Castillo ejerció su ministerio episcopal durante once años en la Diócesis de Autlán.
Ante su muerte, en las primeras horas de este lunes, el obispo Rafael Sandoval Sandoval emitió un comunicado mediante el cual confirmó el fallecimiento de Galván Castillo y pidió a la comunidad católica, «se celebre el novenario de la eucaristía en cada comunidad parroquial a partir de hoy» lunes 23 de noviembre.
Gonzalo Galván Castillo fue obispo de la diócesis de Autlán desde el año 2004 hasta el 2015, cuando el papa Juan Pablo II trasladó al obispo Lázaro Pérez Jiménez a la diócesis de Celaya y designó como obispo de Autlán a Monseñor Gonzalo Galván Castillo.
Gonzalo Galván Castillo pidió su renuncia al Papa Francisco, quien la aceptó en junio de 2015. En ese momento el Vaticano difundió que la renuncia anticipada fue “por causas graves”. Fue señalado por presuntamente encubrir a un sacerdote pedófilo.
En un breve comunicado, emitido en junio de 2014, la sala de prensa de la Santa Sede informó que el papa Francisco aceptó la dimisión según el artículo 401.2 del Código del Derecho Canónico, la ley fundamental de la Iglesia católica. Ese apartado considera las renuncias anticipadas de los obispos por enfermedad y “otra causa grave” que disminuya la capacidad para desempeñar el cargo.
Después de la renuncia de Galván Castillo, el papa Francisco nombró como obispo de Autlán, Jalisco, a monseñor Rafael Sandoval Sandoval, quien se desempeñaba como obispo de Tarahumara.
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