Autlán de Navarro, Jalisco.- El proyecto de monitoreo y divulgación con ciencia ciudadana “Vigilando Ríos y Arroyos” en conjunto con ambientalistas de otras organizaciones y académicos del Centro Universitario de la Costa Sur (CUCSur) hicieron un llamado a la ciudadanía a sumarse a la labor de recuperar los espacios naturales que sostienen a la sociedad, de acuerdo a un informe compartido por las organizaciones.
Este exhorto fue una de las reflexiones principales que surgieron de una jornada de exploración en los arroyos de los municipios de Autlán y El Grullo como parte de la iniciativa mundial The Home River Bioblitz (THRB) 2023, impulsada en esta región por el proyecto Vigilando Ríos y Arroyos.
La exploración fue el 22 y 23 de septiembre, en los arroyos El Cangrejo, El Coajinque, El Tigre y Ahuacapán. Tenía como objetivo documentar la biodiversidad asociada a los arroyos a través de la observación cuidadosa de los participantes, además de visualizar los desafíos ambientales que enfrentan estos ecosistemas.
En la actividad participaron integrantes de la Junta Intermunicipal de la Cuenca Baja del Río Ayuquila (JIRA), Amigos del Coajinque, la Red de observadoras de aves Amazilias, la Asociación Hipatya y profesores-investigadores del CUCSur.
Exploración natural de arroyos
Cada uno de los equipos de exploración estuvo liderado por especialistas. En el arroyo El Tigre, en El Grullo estuvieron a cargo los naturalistas, Abad Aispuro y Claudia Ortiz. En Autlán, en el arroyo El Coajinque, las labores las coordinó Lanci A. Duque.
En el arroyo Ahuacapán estuvieron como encargados, David S. Escandón y Enya Roseli. Y en el arroyo El Cangrejo, Claudia Ortiz y Fátima Robles.
Las caminatas por los arroyos estuvieron guiadas y acompañadas por especialistas en aves como Carlos Palomera, Johana Rentería y Esmeralda Campos de la Red de observadoras de aves Amazilias; junto con expertos en vegetación ribereña; Abad Aispuro, Claudia Ortiz, José Morales, Arturo Solís y Luis Guzmán del CUCSur.
Como especialistas en monitoreo de calidad del agua participaron David Escandón y Lanci A. Duque del grupo Amigos del Coajinque.
Y se unieron también especialistas en monitoreo de macroinvertebrados como Francia Rodríguez, Julián Forero y Larissa Gómez del proyecto Vigilando Ríos y Arroyos. La participación ciudadana la coordinó Peter Gerritsen y el uso de aplicaciones de ciencia ciudadana estuvieron a cargo de Enya Roseli y Ana Arciniega.
La Biodiversidad en Autlán-El Grullo
En los días de la jornada completaron en total mil 487 observaciones, con las cuales documentaron la existencia de 626 especies diferentes de insectos, aves, anfibios, plantas y otros organismos.
En el documento compartido como resultado de estas jornadas mencionaron que entre los hallazgos más notables están los siguientes:
- En El Coajinque vive el mayate de la calabaza, endémico de México y la araña de seda dorada (Trichonephila). Además de la planta ornamental del género Xanthosoma, conocida como orejas de elefante.
- En El Tigre observaron la (Tabernaemontana tomentosa), una especie de planta endémica de interés económico y medicinal; además del pájaro colorín pecho-naranja (Passerina leclancherii), especie endémica del occidente y sur de México, destacada por su belleza y elegancia.
- En Ahuacapán habita la ranita hojarasca (Leptodactylus melanonotus), una rana nativa de México y América del Norte que tiene funciones ecológicas importantes, como el control de plagas y la transmisión de nutrientes acuáticos.
- En El Cangrejo está el murciélago frugívoro (Artibeus), cuya importancia radica en el control de insectos principalmente.
La información detallada de las jornadas la pueden encontrar en este link
Llamado a la Acción
Luego de recorrer por dos días estas áreas las organizaciones y académicos participante hicieron un llamado a la ciudadanía aledaña a la cuenca para sumarse a la tarea de recopilación de datos, conservación activa, educación y limpieza de arroyos.
“La salud de nuestros arroyos es el reflejo de las actividades que realizamos día tras día. Cada impacto negativo que infligen a estos ecosistemas acuáticos representa una herida que comparten con la naturaleza misma. Cuando dañamos a un arroyo, no solo perdemos su belleza y biodiversidad, sino que también cambiamos el sustento de la vida para las criaturas que dependen de ellos, incluyéndonos nosotros”, concluyó el informe.
El The Home River Bioblitz es un movimiento que refleja un cambio en la conciencia colectiva sobre el entorno. Iniciativas como ésta ayudan y abonan a la protección y restauración del equilibrio ecológico de los ecosistemas, siempre y cuando exista acción de parte de la comunidad.