Por: Guillermo Tovar Vázquez, cronista municipal de Autlán | Historias de plaza pública
Autlán de Navarro, Jalisco.- En el Archivo Histórico del Congreso del Estado se encuentra, entre cientos de documentos que contienen gajos de nuestra historia, un interesante expediente fechado en enero de 1825 que contiene la relación de los capitalistas del cantón de Autlán, clasificados por la población en la que radican y con el valor del capital de cada uno de ellos.
Este documento fue elaborado con información recabada durante el año 1824 por delegados en cada pueblo. Esta información fue remitida a los jefes de policía de Autlán y de Mascota, las cabeceras de los dos departamentos en que se dividía el cantón, quienes a su vez entregaron estos datos al gobierno del recién nacido Estado Libre de Jalisco. El destinatario final de este legajo fue el Congreso de Jalisco, a donde fue remitido mediante oficio fechado el 20 de enero de 1825 y firmado por Juan Nepomuceno Cumplido, vicegobernador del Estado y encargado del despacho de la gubernatura, y por José María Corro, secretario.
Estos dos personajes, aunque no muy recordados, fueron de importancia en esos primeros años de la historia del Estado de Jalisco. Cumplido fue diputado al Congreso Nacional Constituyente de 1822 y al Congreso Constituyente del Estado de Jalisco, entre 1823 y 1824, y como encargado de la gubernatura le correspondió promulgar la primera Constitución local. José María Corro, miembro de una prominente familia hidrocálida, ocupó diversos cargos de mediana categoría en el gobierno jalisciense y fue hermano de José Justo Corro, diputado al Congreso de Jalisco y Presidente de la República en un breve periodo entre 1836 y 1837.
El expediente de los capitalistas del cantón de Autlán fue elaborado, junto con los de otros cantones, como un primer paso para establecer una estadística de la economía del naciente Estado. Era necesario saber cuáles eran las principales actividades económicas, quiénes poseían el capital para desarrollar esas actividades y cuánto debería recaudar el Estado por concepto de impuestos.
Este documento es bastante detallado en cuanto a las localidades en las que se encuentra cada capital: aparece la lista completa de los capitalistas de las cabeceras de los departamentos, aún de los capitales más pequeños, pero también los ubicados en rancherías y otras poblaciones poco habitadas. Lamentablemente, no es tan preciso en cuando a los giros en los que se desarrollaba cada capital, solo se menciona el nombre, el monto y la clase de cada capitalista. En este comentario me limitaré a mencionar a los capitalistas que aparecen relacionados en la ciudad de Autlán.
El mayor capital lo tenía la hacienda de Ahuacapán, que en ese tiempo todavía era propiedad de la familia Gómez de Parada, aunque ya nadie de esa familia vivía aquí sino en la ciudad de México. Estaba entonces arrendada a los herederos de Francisco Pacheco y su capital estaba valuado en la fabulosa cantidad de 170 mil pesos, 20 mil de ellos correspondientes a “los muebles y efectos” que se encontraban en la propia hacienda. Este capital representaba el 65% del valor total de los capitales de Autlán, aunque ya Ahuacapán no era la hacienda más rica de la región, posición en la que la había sustituido la de San Clemente.
Muy lejos del valor del capital de Ahuacapán, pero con montos nada despreciables, estaban los comerciantes Mariana Gómez y Jesús Romo y coherederos, este último jefe político de Autlán y uno de los firmantes del acta de jura de Independencia, fechada el 21 de junio de 1821. Doña Mariana no era la única mujer capitalista: en la clase de comerciantes también figuraban Rita Corona y María Gómez, en la de labradores estaba Josefa Araiza y como criadoras, Juana de Dios, Emeteria Monroy y María Moreno. De hecho, ellas son las únicas criadoras que aparecen en la lista.
Entre los 50 capitalistas autlenses hay otro firmante del acta de jura de Independencia, el labrador José María Cabezud y, en la misma categoría, el párroco José Diego Gómez, quien presidió la ceremonia en la que los autlenses juraron la Independencia del país. Vemos también a personajes que llevan apellidos muy arraigados en Autlán, como los comerciantes Ramón y Victoriano Mardueño, los labradores Mauricio Arias y Vicente Michel, y varios Corona, Gómez y Araiza.
El total de los valores de los capitales ubicados en la ciudad de Autlán era de 262, 900 pesos, sin contar los de pueblos del mismo departamento, como Milpa (antepasado de El Chante), el hoy desaparecido Zacapala o Ayuquila.
Las haciendas que fueron el embrión de Unión de Tula (Santa Rosa, Santa Ana, San Cristóbal), todavía aparecen relacionadas aparte, aunque integrando el capital del joven pueblo. La de San Clemente, entonces con un valor de 200 mil pesos, aparece como parte del capital de Tenamaxtlán, debido a que la mayor parte de su territorio se encontraba dentro de la jurisdicción de ese pueblo.
La relación correspondiente al departamento de Autlán está firmada por Jesús Romo de Vivar, Ricardo Villaseñor y Pedro Cabezud por Autlán, José Simón Rosales y José Basilio Preciado por Cuautla, Felipe García Lazcano y Eduardo Villaseñor por Unión de Tula, Alejandro Ramírez y José Bernardo por Tenamaxtlán, José Guadalupe de Uribe y Damián Morán por Tepospisaloya, Miguel Velasco y José Florencio Naranjo por Ayutla y Francisco Angulo y Mateo Castañeda por Purificación.
Fuentes:
- Archivo Histórico del Congreso del Estado de Jalisco. Planillas y capitales del cantón de Autlán y sus villas y pueblos. Legajo 51 no. 13. https://congresoweb.congresojal.gob.mx/BibliotecaVirtual/Archivo_Historico/Archivo_Historico.php
- Cumplido y Rodríguez, Juan Nepomuceno. Enciclopedia histórica y biográfica de la Universidad de Guadalajara. http://enciclopedia.udg.mx/articulos/cumplido-y-rodriguez-juan-nepomuceno
- José María Corro Silva. https://gw.geneanet.org/sanchiz?lang=es&n=corro+silva&oc=0&p=jose+maria&type=timeline