Evo Morales, anunció su renuncia como presidente de Bolivia. Calificó lo que ocurre como un golpe de Estado. Este hecho cambia la correlación de fuerzas en toda la región latinoamericana, incluido México.
Por: Pie de Página
11 de noviembre de 2019. (Letra Fría) Evo Morales renunció este domingo a la presidencia de Bolivia. En un mensaje televisado, explicó que con ello busca evitar un derramamiento de sangre en su país.
El anuncio lo realizó pocas horas después de que la cúpula de las Fuerzas Armadas y la Policía le sugirió presentar la renuncia para detener la escalada de protestas y prevenir un derramamiento de sangre.
Evo Morales dio la noticia por medio de un video. Aseguró que tomó esta decisión para evitar que se siga lastimando a los bolivianos, y permitir el regreso de la paz y la estabilidad . Desde días antes, Evo Morales denunció que grupos de empresarios y policías tenían la intención de efectuar un golpe de Estado, así como otros opositores al gobierno que en otros momentos acusó de racistas.
“Renuncio a mi cargo de presidente para que (Carlos) Mesa y (Luis Fernando) Camacho no sigan persiguiendo a dirigentes sociales”, insistió Morales durante este mensaje de despedida. Se refiere a los líderes opositores que convocaron las protestas en su contra, desatadas desde el día siguiente de los comicios del 20 de octubre.
A la comunidad internacional, pidió Morales, “digan la verdad, sobre este golpe de Estado. Repito: ser indígena y ser de izquierda, es nuestro pecado”.
Evo, desoído
Apenas la noche anterior, Evo Morales anunció su intención de convocar a nuevas elecciones en el país, como la Organización de los Estados Americanos recomendó. Incluso invitó al papa Francisco como mediador de los comicios, y la propia Organización de Estados Americanos.
Pero el anuncio de Evo Morales fue desoído. Durante la madrugada, grupos opositores atacaron con violencia las casas de algunos de los funcionarios cercanos a Morales.
Renuncias bajo el fuego
Para la mañana del domingo, varios de ellos renunciaron. Y acusaron que lo hicieron para prevenir derramamiento de sangre contra sus seres queridos.
Dos ministros del gobierno, la vicecanciller, dos gobernadores y el presidente de la Cámara de Diputados anunciaron su renuncia horas antes. (El sábado ya se habían presentado otras renuncias en medio de la crisis política y social. )
Por ejemplo, Luis Alberto Sánchez, ministro de Hidrocarburos, dijo en su carta publicada el domingo que “la confrontación y la violencia entre hermanos bolivianos no es el camino que conduzca a una salida pacífica”.
El presidente de la cámara de Diputados de Bolivia, Víctor Borda, renunció temprano este domingo, después de que manifestantes atacaran su domicilio, y la incendiaran. “Ojalá que sea para preservar la integridad física de mi hermano que ha sido tomado como rehén”, expresó a medios locales.
El ataque a seguidores y familias fue característico, en estos días de protestas. El día anterior, el sábado 9 de noviembre, la casa de la hermana de Evo en la ciudad de Oruro fue incendiada. También las viviendas de los gobernadores de la región homónima y de Chuquisaca.
México y el cambio geopolítico
La renuncia de Evo Morales genera un cambio en la correlación de fuerzas al interior de la región latinoamericana. Ello tiene consecuencias directas en México.
En fechas recientes, se barajaba la posibilidad de que el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, podría encabezar el Frente Progresista en América Latina. Andrés Manuel es el presidente más popular, con mayor respaldo, de los gobiernos percibidos como izquierda. por lo que se esperaba que en torno a él se aglutinara una tendencia en la región.
También, recientemente AMLO habló sobre la inviabilidad de un golpe de Estado en el país. Sin embargo, lo ocurrido en Bolivia recuerda las resistencias que en la región existen contra posibles gobiernos contrarios a corrientes más conservadoras.
