El obispo de la Diócesis de Autlán, Rafael Sandoval, pidió a los feligreses prevenirse ante posibles ataques contra la fe cristiana en referencia a la celebración religiosa de Navidad: “La iglesia hoy está muy perseguida, pero no hay que agachar la cabeza, prepárense para los que vienen. Nuestra alegría no es inventada, tiene nombre: se llama Jesús de Nazaret”.
Por: Vianney Martínez Pérez
Autlán de Navarro, Jalisco. 05 de diciembre de 2021. (Letra Fría).- El día 25 de diciembre en México y en otros países occidentales se lleva a cabo la celebración de Navidad, la cual conmemora el nacimiento de Jesús de Nazaret. Justamente en la eucaristía del segundo domingo de adviento previo a Navidad, el obispo de la Diócesis de Autlán de Navarro, Rafael Sandoval Sandoval, pidió a sus fieles estar preparados ante posibles ataques contra la fe católica y los alentó a defender sus creencias.
“La iglesia hoy está muy perseguida, pero no hay que agachar la cabeza, prepárense para los que vienen. Nuestra alegría no es inventada, tiene nombre: se llama Jesús de Nazaret”, declaró el obispo, a tan solo tres semanas de la celebración religiosa de Navidad.
Además Sandoval Sandoval dirigió unas palabras hacia las y los fieles en referencia de sus actitudes ante las situaciones mundiales, así como los comportamientos que realizan en torno a su fe. Expresó que la realidad de los problemas sociales van más allá de perjudicar, y traen consigo lecciones y aprendizajes.
“Tanto la enfermedad como la salud, la riqueza y la pobreza nos ayuda, depende de cómo los miremos. La realidad no es como la pintan solamente, la realidad está ahí”, dijo el obispo.
Asimismo, refirió que uno de los obstáculos para llevar una vida plena es el apego, el cual de acuerdo con el obispo, puede traer por consecuencia la desgracia.
“Desear es bueno, pero cuando el fin no lo es nos podemos apegar. Ahí está el problema, la raíz del sufrimiento está en el apego, hay que pedir la gracia de vivir desapegados”, expresó Sandoval Sandoval.
Al respecto, aconsejó a las y los asistentes a mantener una actitud activa frente a los dominios que estructuran la vida en lo colectivo y en lo individual.
“¡Que brote la alegría! En medio de las circunstancias, de una pandemia que ya ha durado más de dos años, de nuestras inseguridades. Es cierto que también nosotros estamos bajo muchos dominios: políticos, religiosos y el carácter de uno mismo…,despréndete de tu soberbia, sé humilde, porque lo único que te vas a llevar es el amor que has dado”, compartió el sacerdote.
VM/DR
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