Por: Vianney Martínez Pérez
Autlán de Navarro, Jalisco.-Durante casi un año, estudiantes de la Escuela Primaria Cosío Vidaurri, en Autlán de Navarro, han tomado clases entre escombros y bajo toldos. El temblor de magnitud 7.7 que sacudió al occidente del país dejó estragos. Más allá de los impactos psicológicos y físicos de las personas, el sismo arrasó con infraestructura vital para el desarrollo humano.
Después del 19 de septiembre de 2022, infantes de la Escuela Primaria Cosío Vidaurri perdieron el área donde aprendían, jugaban y creaban. En total, 8 aulas y los baños de la institución se desplomaron; algunos espacios de la primaria presentaron daños en sus techos, en el sistema eléctrico y drenaje.
Luego del shock de los menores y docentes, la realidad llegó más sorpresiva de lo que se pensaba: la escuela estaba hecha escombros. La normalidad abrigó poco a poco a Autlán. Mientras toda la gente realizaba sus actividades tal como las hacían antes, quienes conforman y frecuentan la Escuela Primaria Cosío Vidaurri, no.
El desastre después del temblor
Era imposible disponer de las aulas y áreas educativas. La preocupación y duda comía a los profesores y padres de familia. Una idea salió a la luz de la mesa directiva y autoridades del plantel: acondicionar un espacio al aire libre para tomar las clases.
Así, con apoyo del Ayuntamiento de Autlán, la escuela liberó espacio de su área para instalar toldos. Éstos, fungieron como techos provisionales, protegían del sol y, en ocasiones, eran barrera de los vientos cuaresmales.
«Hubo muchas carencias, ¿no? Niños que, de repente, tenían alergias por estar debajo de los árboles y el polvo. Una los mandaba completamente limpiecitos y pues ellos estaban en la tierra«, dijo Mayra Montaño, madre de familia de un menor de la escuela.
Algunos tutores se quejaron al percatarse que sus hijos son sensibles a la exposición prolongada del ambiente. En respuesta, la Directora de la Escuela Primaria Cosío Vidaurri, planteó iniciativas alternas:
«Desde ahí decidimos buscar otras opciones. Sacamos a los niños a las afueras de los salones para poder brindarles más seguridad e instalamos toldos; otras veces nos íbamos de manera híbrida, unos grupos asistían otros iban en línea«, explicó.
Búsqueda de soluciones
Mientras tanto, la estructura de la escuela permanecía destrozada. Un mes y medio después del temblor, el Ayuntamiento de Autlán de Navarro cooperó con material de construcción para rehabilitar los baños de la primaria; padres de familia soltaron de su bolsa presupuesto para contratar la mano de obra. A pesar de que la mesa directiva de la institución cuenta con una plataforma de ahorro, los tutores nunca pensaron que el presupuesto sería destinado para una obra de urgencia.
«El baño era el que tenía un poquito más de daños; se rehabilitó con el apoyo que nos dio el Gobierno de Autlán. También se buscó el apoyo del Gobierno del Estado, padres de familia llevaron oficios. También hice gestiones a la Secretaría de Educación Jalisco, al Gobierno Estatal y Federal y con algunos diputados«, afirmó la Directora de la Escuela Primaria Cosío Vidaurri.
La intervención de los baños arrancó, por su parte, las 8 aulas y el resto de los servicios continuaron inhabilitados. La problemática de la exposición de los chicos al aire libre siguió, por lo que se gestionó acuerdos con la Escuela Primaria Cuauhtémoc y la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), para que ambas instituciones dividieran en sus salones a los 440 infantes matriculados en la Cosío Vidaurri.
«En la escuela (Cosío Vidaurri) estuvieron hasta el mes de mayo, porque buscamos la opción de no irnos a la virtualidad ya que no va mucho con nosotros. Algunas veces, como no teníamos tantos espacios iban a la escuela seis grupos o la otra mitad de la escuela, pero sí se buscó que estuvieran atendidos allí en toldos«, contó Margarita Hernández Morán.
La situación impactó a los padres de familia y/o tutores:
«A uno de mis niños me lo mandaron a una escuela y a otro a otra, entonces, hay un problema en cuanto a los traslados. Primero iba a dejar una niña, luego a la otra, es algo que nos atrasó. Ahí nos pudimos organizar varios padres de familia«, recordó Mayra Montaño.
La incertidumbre
En mayo, a unos cuantos días de la visita del Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, a Autlán y la región, el gobierno estatal informó a Margarita Hernández acerca de una inversión en remodelación y reparación de la primaria en su totalidad. La rehabilitación inició y está a cargo al 100 por ciento del Gobierno de Jalisco.
Para Letra Fría, el encargado de la obra, Javier Corona, explicó que la remodelación podría terminar a mediados de septiembre:
«Estamos a mitad de la estructura metálica. Anteriormente eran polines de madera y se le está haciendo el cambio al polín a la viga de acero«, detalló.
Javier Corona aseguró que, según su diagnóstico, la primaria tenía más de 50 años sin ser intervenida:
«El cambio que se le está haciendo a esta escuela es para que, por lo menos, 40 o 50 años esté bien, porque van a meter lámina de muy buena calidad, de doble relleno que precisamente es aislante del calor y de la humedad«, informó.
Ahora, la incertidumbre recae en lo que sucederá en el próximo ciclo escolar, que está a unos días de comenzar. A casi un año del sismo, los alumnos, maestros y papás aún lidian con las consecuencias. A modo de presión, piden agilidad en el proceso de reconstrucción, ya que la directora aún no cuenta con la certeza de los lugares donde estudiarán las niñas y niños.
«El temporal de lluvias está afectando las labores. No es lo mismo trabajar sin inconvenientes, pero sí se les está exigiendo trabajos prontos y bien terminados para que esté listo en el próximo ciclo escolar«, continuó, «Tengan paciencia, no está en mis manos iniciar el ciclo escolar. Ya tuvimos una paciencia muy admirable y ahora ya se ven avances de la obra«, finalizó.
Los estudiantes de educación básica regresan de vacaciones de verano el próximo 28 de agosto. Hace unos días, la redacción cuestionó a la Directora de la Escuela Primaria Cosío Vidaurri acerca de la actualización de la situación y aseguró «no contar con la información aún»; no se sabe en qué espacios estudiarán los infantes.
MV
