Por: Carmen Aggi Cabrera
Atengo, Jalisco. 29 de agosto de 2022. (Letra Fría) Este martes Atengo vivirá la romería de la Virgen de la Natividad, una tradición que data del año 1615. La romería significa el evento religioso que convoca al mayor número de fieles en la Diócesis de Autlán.
La romería por sí sola es importante para los fieles católicos, que han sostenido y mantenido la tradición durante 407 años. Sin embargo, esta romería será especial para los creyentes porque la volverán a vivir después de dos años de haberla suspendido debido a la pandemia de covid-19.
Como lo marca la tradición, a principios de junio los peregrinos atenguenses llevaron a sus hermanos de Tenamaxtlán la imagen de la Virgen de La Natividad para dejarla en su parroquia durante tres meses.
Mañana, 30 de agosto, los tenamaxtleneses regresarán a «La Nati» -como cariñosa y respetuosamente le dicen a la imagen-, a la parroquia de Atengo. A las 06:00 de la mañana habrá una misa que despedirá a la virgen de la parroquia de Tenamaxtlán. Después, con oraciones, danzas y música de mariachi y banda, comenzará la peregrinación hacia Atengo.
En La Cofradía de Pimienta, en los límites de ambos municipios, los de Atengo recibirán a su virgen con un ritual religioso y seguirá la peregrinación hasta llegar a su casa, la basílica de Atengo.
Atengo está listo para recibir a los peregrinos
De acuerdo con la alcaldesa de Atengo, Tere Valle, el municipio está listo para recibir a los peregrinos. Durante los últimos meses las autoridades eclesiásticas, del gobierno de Atengo y Tenamaxtlán, han sostenido diversas reuniones para organizar las actividades que forman parte de la romería.
Para darle atención a los peregrinos, el municipio de Atengo implementará un operativo de seguridad:
«Desde las 06:30 de la mañana se va a cerrar la carretera de Atengo a Tenamaxtlán y viceversa, no va a haber paso, habrá un operativo especial en donde van a participar elementos de Protección Civil y de Seguridad Pública de varios municipios, que vendrán a reforzarnos», dijo la alcaldesa en entrevista a Letra Fría.
Como parte de los preparativos, el gobierno local le ha dado mantenimiento a los espacios públicos que serán utilizados por los peregrinos:
«Hemos estado pintando la plaza principal, el puente, y todos los espacios públicos que hay en Atengo para que tenga una buena imagen para recibir a los visitantes y peregrinos que vendrán al municipio. Todos son bienvenidos a Atengo».
Para la presidenta municipal la romería es importante para Atengo porque fomenta los lazos de hermandad con Tenamaxtlán y representa el principal detonador de derrama económica en el municipio.
«Es una tradición muy arraigada y es una forma de hermanarnos y de tener ese hermanamiento con Tenamaxtlán. Además de estar unidos, por ser vecinos, también unos une la fe por la virgen de la Natividad y es la fiesta religiosa más importante de Atengo y la región. Además, es la actividad que genera más derrama económica».
Para apoyar a los comerciantes, el gobierno de Atengo decidió no cobrar impuestos a los vendedores de alimentos.
Una tradición de más de 400 años
Este 2022 se cumplen ya 407 años de llevar a cabo, año tras año, con fe y devoción, esta costumbre y tradición ancestral, considerada Patrimonio y Legado Religioso, Cultural e Histórico del Estado de Jalisco.
La romería de Atengo sólo se interrumpió durante la Guerra Cristera (1926-1928), debido al conflicto entre la Iglesia y el Estado, por estar prohibida toda manifestación de culto católico. Y durante los años 2020 y 2021, debido a la pandemia de covid-19.
Desde el año 1662, la imagen de la virgen fue llamada y conocida con el título de Nuestra Señora de la Natividad.
Por sus rasgos y características, la imagen de la virgen de la Natividad es una obra hecha alrededor de los años 1520-1530, cuya escultura en los siglos XVI, XVII y XVIII, no necesitaba vestuarios de tela como hoy, ya que era una imagen esculpida, tallada y estofada.
Posteriormente, a mediados del siglo XIX, debido al maltrato y deterioro que había sufrido, se pensó en hacerle algunas modificaciones y adaptaciones a la misma, para poder vestirla con ricas telas y de esta manera, disimular el notable desgaste que la acción del tiempo había causado en ésta bendita obra de arte sacro. Por ésta razón en el transcurso de los dos últimos siglos, Nuestra Señora de la Natividad ha tenido varios cambios en la manera de vestir de acuerdo a los estilos de cada época.