La inocuidad garantiza que los alimentos que consumimos sean seguros, es decir, que durante cada proceso: producción, transporte, cocción, entre otros, se aplicaron medidas de higiene adecuadas que reducen el riesgo para la salud de los consumidores.
Lo anterior, lo señalan Monserrat Rodríguez León y Delia Estrada Palafox, académicas de la Licenciatura en Ciencias de la Nutrición de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG).
¿Qué es?
Todas las personas tienen derecho a una alimentación segura, nutritiva y suficiente. Sin embargo, aproximadamente 1 de cada 10 personas en el mundo se enferma después de comer alimentos contaminados.
Cuando los alimentos no son inocuos, los niños no pueden aprender y los adultos no pueden trabajar. Además, la inocuidad alimentaria es fundamental para la promoción de la salud y la erradicación del hambre.
Por lo tanto, todos a lo largo de la cadena alimentaria somos responsables de garantizar la inocuidad de los alimentos. Desde los productores hasta los consumidores, debemos considerarla ahora y en el futuro.
Según las académicas de la UAG, la inocuidad alimentaria es un asunto de todos por lo que las empresas alimentarias y los gobiernos deben cuidar los procesos de manipulación, pero también depende de las acciones o eventos ocurridos en casa por ejemplo mantener la temperatura del refrigerador siempre por debajo de 4°C y la del congelador por debajo de -18°C garantizará que los alimentos tengan mejor conservación y prevenimos el crecimiento de microorganismos que pueden ser dañinos para la salud.
Medidas para la inocuidad de los alimentos
Limpieza: Siempre lávate las manos con agua y jabón antes y después de manipular alimentos. Limpia bien las superficies y utensilios que entran en contacto con los alimentos.
Separación: No mezcles alimentos crudos con cocidos o listos para comer, para evitar la contaminación cruzada.
Cocción: Cocina los alimentos a la temperatura adecuada para matar microorganismos dañinos. Usa un termómetro de alimentos para verificar.
Almacenamiento: Refrigera los alimentos perecederos dentro de las dos horas después de comprarlos o prepararlos. Mantén el refrigerador a 4°C o menos y el congelador a -18°C o menos.
Consumo: Presta atención a las fechas de caducidad y consume los alimentos antes de que expiren.
Recuerda que mantener una buena higiene y manejo adecuado de los alimentos es clave para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos.