Eva es una luchadora social en Sierra de Amula. Desde 1998 defiende los derechos agrarios en comunidades rurales. Inició sola, pero hoy lucha en compañía de sus tres hijos para lograr una sociedad justa y feliz. Esta entrevista forma parte del especial “5 Historias + 5 Mujeres” de Letra Fría.
Por: Esther Armenta
Autlán de Navarro, Jalisco. 9 de mayo de 2020. (Letra Fría) Detrás de la bocina, Evangelina Robles dice que sí, que los hijos le cambiaron la vida. Durante 13 minutos al teléfono, la mujer que desde 1998 dedica su tiempo a defender el territorio de comunidades rurales, narra cómo la vida le fue replanteada con la llegada de su primer hijo, Iván, en 2006. Actualmente tiene 3 hijos y una trayectoria de 22 años como luchadora social; ser madre, asegura, le abrió los ojos al mundo.
EA: ¿Qué es ser madre?
EA: ¿Qué llegó primero, la maternidad o la lucha social?
ER: Soy luchadora social desde el 98. Soy abogada de profesión y desde que egresé trabajo con comunidades rurales y campesinas en la defensa de sus derechos agrarios y sus derechos colectivos, derechos humanos. Mi primer hijo nació en el 2006.
EA: ¿Cómo se hace para lograr que ambas cosas funcionen?
ER: Hay que ser malabarista, no es fácil pero creo que es muy parecido a lo que hacen todas las mamás en las actividades que hacemos además de ser mamás. Es complejo, porque eres una persona en sí misma pero también eres alguien que provee y acompaña el crecimiento de otras personas y creo que todas somas malabaristas y en mi situación particular he logrado encontrar el equilibrio.
Cuando nació mi primer hijo, yo pensé, me imaginé muy consciente que iba a ser difícil compaginar las dos cosas. Cuando nació Iván yo trabajaba tiempo completo en las comunidades huicholas al norte de Jalisco, era su abogada en el tema de defensa de tierras y estaba metida 24 horas, preocupada, y cuando nació mi hijo inicié a abrir el foco hacia él y a mí lo que me ha facilitado mucho es hacer las cosas en colectivo, en comunidad, nunca he estado sola, además del papá hemos vivido en comunidad.
EA: ¿Cuáles considera que han sido sus logros como madre?
ER: Verlos a ellos como personas con capacidad de decisión, reflexión, personas completas. Cuando éramos pequeños nos decían “no sabes, eres pequeño, no entiendes”; yo creo que los niños entienden todo en su dimensión, con la experiencia que tienen viviendo. Ese ha sido mi acierto, nos tenemos confianza y nos apoyamos mutuamente.
EA: Las mamás son percibidas por sus hijos como indestructibles, pero, ¿las mamás tienen miedos? ¿Cuáles son los suyos?
ER: Que se enfermen de gravedad por la contaminación del medio ambiente, no poder parar la contaminación en el aire, la tierra. El tema de toxicología lo trabajamos desde 2005 y conocemos los efectos que tiene, hemos tenido cuidado con qué comen pero todos estamos expuestos.
Antes de colgar, Eva dice que la maternidad, con toda la diversidad que hay en ella, es fundamental para lograr “una sociedad justa, amable y feliz”.
LL/LL
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