Hace ocho años, el acceso a la playa Careyitos fue cerrado por particulares, lo que impidió el paso de vehículos de los pescadores locales. Hoy, el gobierno de Jalisco negoció la reapertura de la zona costera, lo que permitirá continuar con la actividad pesquera y el desarrollo económico del lugar.
Por: Esther Armenta
La Huerta, Jalisco. 25 de octubre de 2019. (Letra Fría) Los pescadores están de fiesta en la playa Careyitos. Este jueves, al menos 17 familias costeras vieron la apertura de las puertas que durante 8 años estuvieron cerradas. Tras una negociación definida por el gobernador de Jalisco como “justa”, quienes se dedican a la pesca podrán acceder en vehículos para facilitar su labor.
En un acto simbólico, los pescadores estuvieron acompañados por autoridades estatales durante el acceso al camino que conecta la carretera federal 200 con la zona costera de Careyes.
La lucha que comenzó durante las elecciones federales de las que salió vencedor Enrique Peña Nieto, llegó a su fin. De acuerdo con Manuel Álvaro Sánchez Curiel, representante legal de Sociedad Cooperativa de Producción Pesquera de Rivera Punta Pérula, este logro es un momento de satisfacción luego de años de desgaste y trabajo arduo.
“El 2 de julio de 2012 se puso esa puerta y de ahí hemos trabajado entrando con carretilla y cargando nuestras cosas básicamente con nuestro equipo de pesca. Es una emoción y un gusto enorme porque casi 8 años arriando una carretilla es muy pesado y desgastante, porque además nuestras embarcaciones debemos subirlas con una camioneta o jalarlas y al no dejarnos entrar en vehículos debemos traer más gente para que nos ayuden a subirlas. Estamos muy agradecidos”, aseguró.
El pescador de 35 años dedicó este acto a sus compañeros fallecidos antes de la liberación de la playa. Frente a las autoridades estatales y familias pesqueras, mencionó los nombres de Felipe Barbosa, Rodolfo Mendoza, Víctor Valencia y Aureliano Sánchez, “que siempre soñaron y lucharon porque llegara este momento”.
Terminado el evento protocolario, Sánchez Curiel compartió con Letra Fría que además de la liberación, se contemplan inversiones importantes para el desarrollo económico de sus familias, debido a la ubicación que ocupa playa Careyitos dentro de la Costa Alegre.
“Esta playa es muy importante porque estamos de vecinos con los desarrollos turísticos de gran impacto económico. Tenemos el Hotel Careyes, Playa Rosa, Playa Blanca, Rincón de Careyes. Para nosotros es un gran apoyo porque ellos vienen y consumen nuestros productos y que son más baratos de lo que están acostumbrados y al mismo tiempo nos dejan una derrama económica”.
La inversión incluye un restaurante cooperativo administrado por familias locales, la donación de una lonja, construcción de un estacionamiento, una palapa pública y bodegas para el almacenamiento de equipo pesquero. Al respecto, el representante legal de los pescadores señaló que esta inversión ayudará a incrementar las ganancias de sus familias.
“Todo el tiempo tuvimos un restaurancito y está en condiciones muy humildes, ahora con esto se pretende hacernos uno muy en forma. Con una lonja para procesar el producto y venderlo directamente al consumidor para que no haya terceros que encarezcan y ganen lo que debemos ganar directamente. Vamos a crear un organismo que se encargue de contratar empleados que puedan ser de nuestras propias familias, para vender nuestros productos frescos, de calidad, con un buen servicio y las ganancias poderlas repartir para todos”.
Como Manuel Álvaro, otros pescadores sienten la alegría de ver el camino libre hacia la playa a la que llaman “de todos”. Carlos Mendoza, conocido como “El Mere”, ha pasado toda su vida en el mar y tiene 45 años buceando. Durante los últimos años, él y otros compañeros no tuvieron otra opción más que resistir:
“Aguantar, aguantar, aunque nos diera mucho coraje nos tragamos el coraje que nos dio, nos tuvimos que aguantar para no llegar a estos extremos. Pero de todos modos algo quedó adentro porque dicen que el coraje se acumula y ahora lo vamos a sacar, a tratar de sacarlo porque es una alegría”.
Hoy, “El Mere” confirma que “la alegría que tienen ellos la tengo yo” y manifiesta que el futuro de su trabajo está en continuar con su oficio y crecer:
“Seguir trabajando y mejorar. Que la gente, los proveedores vengan a comprar nuestro producto”.
LL/LL
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