Por Carmen Aggi Cabrera
San Isidro, Jalisco. 07 de julio de 2022. (Letra Fría) La comunidad de San Isidro está agotada. Creyeron que el jueves sería un día histórico y terminaría la lucha que han sostenido durante 83 años por recuperar su territorio, pero el Gobierno Federal otra vez les falló y la justicia no ha llegado.
“Le están dando oportunidad a la empresa (Nutrilite) de que haga sus fechorías junto con estos cómplices de funcionarios”, denuncia don Raúl de la Cruz Reyes, presidente del Comisariado Ejidal del ejido San Isidro.
La Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) delegación Jalisco, ha incumplido la orden de entregar la posesión de las 280 hectáreas del predio El Petacal, ubicado en San Gabriel, Jalisco, a sus legítimos dueños: el ejido San Isidro.
“La situación sigue candente porque quedaron de entregarnos las tierras, se dio una orden de que se ejecutara el día 30 (de junio) y el día 1 (de julio) mandaron un equipo, una brigada de funcionarios, que no saben. Son inútiles. No pudieron hacer las cosas”, reclama don Raúl de la Cruz Reyes.
Desde el jueves que inició este proceso. Todo parece que la SEDATU ha puesto trabas para darle tiempo a la empresa Amway-Nutilite. En la comunidad afectada consideran que la están “favoreciendo” para no entregar la posesión de las tierras.
Inicialmente sólo tendrían 24 horas para desalojar o reaccionar, pero como ya lo relató Letra Fría, se les otorgaron 72 horas y ese plazo ya venció a las 23:59 del miércoles 6 de julio.
El reclamo de la comunidad es que el titular de la SEDATU, Sergio Rosey Cedillo, se comprometió a entregarles la posesión el primer minuto de hoy 7 de julio 2022 y no lo cumplió.
SEDATU favorece a Nutrilite, no la legalidad
En el ejido San Isidro la asamblea que es el órgano de gobernanza está en calidad de “permanente”.
Se cumplieron siete días de haber comenzado el proceso de entrega de la posesión de las 280 hectáreas y no dudan en afirmar que las autoridades están favoreciendo a la transnacional Nutrilite y, a ellos, les está negando su derecho a la justicia.
El Comisariado Ejidal insiste que la SEDATU debe dar la cara a la comunidad y continuar con el proceso hasta su conclusión, con la entrega de posesión de las tierras dotadas al ejido.
El Subdelegado de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano en Jalisco, Saik Alarcón Esparza, simplemente dejó de atender las llamadas a los campesinos el fin de semana. Incluso desde la Ciudad de México le han sugerido al ejido que viajen a Guadalajara.
La molestia ya subió de tono por cómo se escucha a Raúl de la Cruz el presidente del comisariado, “hago contacto con él, me manda otra vez que vaya a Guadalajara con Saik Alarcón y le marco a Saik y nunca me contesta, le mando mensajes, nunca me los contesta. Decido hablar con Dulce María (Rodríguez, representante de la SEDATU) y que el asunto se está trabajando pero ya más arriba (…) lo que me da esperanza que esto se está trabajando con los jefes de esta bola de corruptos”.
Registro Agrario Nacional en contra de San Isidro
El engaño que sienten como burla las y los campesinos, también tiene otro remitente: el Registro Agrario Nacional (RAN).
“Es una tristeza porque están jugando con los sentimientos de los campesinos, ellos siguen evadiendo la justicia para que no llegue”, sostiene Don Raúl.
Al ejido le han argumentado que deben ir Guadalajara “para continuar con el procedimiento de deslinde y posesión” cuando los trabajos de la brigada de ejecución deben de continuar en campo desde que se inició el proceso de ejecución de Resolución Presidencial hasta concluir el acto jurídico.
El vocero de la comunidad lo interpreta como una evasión para postergar la entrega de las tierras.
Desde el sur de Jalisco el presidente del Comisariado Ejidal, envía un mensaje pidiendo solidaridad y explica cómo los daños imperceptibles se acumulan en la comunidad “está destrozada, estamos todos enfermos de tantos días de lucha, de encierro, en redactar una pequeña acta que nada más venían a dar posesión y seguimos todavía con la esperanza (…) hay fuerza, estamos todavía esperando que sí se arreglen las cosas y los ánimos de la gente siguen todavía latentes”.
Edición: Jade Ramírez