Mantén siempre pensamientos positivos porque de eso hablará tu boca:
Consejo de mi madre.
Veirtuh Gama Soria
Autlán de Navarro, Jalisco. 06 de junio de 2022. (Letra Fría) Desde mi inicio en la locución por allá en 1997, me di cuenta que la comunicación es una gran responsabilidad, pues el uso de las palabras, el ánimo en que son pronunciadas y la forma en que se dicen, pueden tener un efecto importante en las personas; por eso es importante cuidar las palabras y la forma de expresarnos al comunicar algo.
Las palabras que usamos para comunicarnos pueden determinar nuestra cultura y forma de ver las cosas. Son el mejor referente para dar cuenta de nuestra historia de vida y educación. Un claro ejemplo de ello, es la manera en que muchos hombres se expresan de la mujer, al utilizar palabras que destacan solo su belleza y no otra cualidad, con lo que dejan de manifiesto, la violencia simbólica machista con la que han sido educados.
Otra característica en el lenguaje de muchas personas es el hablar en diminutivo, ya sea para suavizar peticiones o para denotar cierto nivel de vergüenza, por ejemplo: ‘por favorcito’, ‘no seas malita’. Muchas veces el uso de estos sufijos expresan cercanía o cariño, pero su uso está determinado como poco cortés.
Y desde luego, se encuentran aquellas palabras que se usan para dañar a los demás. Decía Renato Russo: “Las palabras cortan mas que los cuchillos. Ellas no perforan la piel, rasgan el alma”. Probablemente muchos no utilizarían un cuchillo para dañar a alguien, pero si harían uso de las palabras, que a diferencia de un daño físico, pueden llegar a ser más dañinas pues rasgan el alma y para eso no hay cura.
La comunicación en este sentido, no solo involucra a un emisor y un receptor, también se encuentran las palabra que usamos para hablarnos a nosotros mismos, y esto puede ser factor de bienestar o sufrimiento, por eso es importante dedicarnos palabras de poder y fortaleza, porque representan una trascendencia inmensa para nuestro bienestar psicológico.
También la ausencia de palabras puede ocasionar un problema, principalmente en una relación de pareja, pues supone falta de comunicación y atención.
Es necesario detenernos un poco y hacer una pausa para analizar el uso que hacemos de las palabras para expresarnos y de ser necesario reeducar y restaurar nuestro vocabulario pues determinan nuestra educación, nuestra forma de pensar y nuestras acciones.
«Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino», Mahatma Ghandi.
MA/MA