Por: Vianney Martínez Pérez
Autlán de Navarro, Jalisco. (Letra Fría). Después un año de actividades como Nuncio Apostólico de la República de El Congo y El Gabón, monseñor Javier Herrera Corona se encuentra de vuelta en Autlán, tomando unas vacaciones. Como una de sus primeras acciones durante su estadía, el también obispo emérito de Autlán de Navarro, ofició la última eucaristía del mes de abril en la Catedral de la Santísima Trinidad.
En el domingo del buen pastor, Monseñor Javier Herrera Corona apareció inesperadamente ante los fieles. El obispo emérito de Autlán de Navarro, presidió la última misa del mes de abril, arrancando así su periodo vacacional, luego de haber viajado al otro lado del mundo para ejercer como Nuncio Apostólico de la República del Congo y El Gabón.
Antes de comenzar con la eucaristía, Monseñor Javier Herrera se dirigió a los fieles, quienes previamente lo recibieron con cantos y un minuto de aplausos:
«Agradezco, en primer lugar, al señor obispo Rafael, por darme la oportunidad de presidir esta eucaristía. Hoy es el domingo del buen pastor y día de orar por el seminario, así que vamos a comenzar con la misa», dijo el religioso.
Al finalizar la lectura del evangelio de Juan, el obispo explicó a los asistentes que «nuestra vida no se debe llenar de cosas efímeras, sino de lo que perdura»; haciendo referencia al pasaje en el que Jesús le dice a los fariseos acerca de los falsos pastores.
Continuando, Herrera Corona aseguró que el ser un pastor no se refiere solamente a los líderes religiosos, sino a la comunidad en general, puesto que «al ser bautizados recibimos el potencial sacerdotal, profético y real».
«Tú también estás llamado a amar y dar la vida por los demás. Vivimos en una sociedad individualista, donde todos queremos recibir y que nos traten bien, pero cuando nosotros tenemos que hacerlo se nos olvida», afirmó.
Monseñor, pidió a la feligresía orar por los pastores de todas las comunidades, para que las personas que no son creyentes se acerquen a la fe católica.
Un poco antes de dar la bendición, Javier Herrera mandó un mensaje a los fieles, especialmente a quienes sintonizaban la celebración desde sus hogares:
«En mi experiencia personal, que he vivido post-pandemia, en Asia, Europa y, ahora, África, he podido notar que muchos hermanos que antes atendían a la misa regularmente se han enfriado y ya no vienen a la eucaristía. Quiero decirles que la misa por internet, televisión o radio no sustituye la experiencia de comunidad; es solamente para situaciones extraordinarias», el obispo emérito continuó, «Los invito a dedicarle tiempo a Dios, regresen a su comunidad y a su iglesia», finalizó.
Colecta por el día del seminario
Monseñor Javier Herrera Corona pidió orar por los seminaristas y el Seminario Diocesano de Autlán «Sta. María de Guadalupe», en su día mundial.
Previamente, en la eucaristía del penúltimo domingo del mes, se avisó a la iglesia que el diezmo de la misa del 30 de abril sería destinado para el Seminario Diocesano de Autlán, en razón del Día del Seminarista.
En aquel entonces, se explicó a los fieles que el seminario no solamente da asilo y necesidades básicas a los seminaristas, sino que también paga salarios de profesores y personal.
Al concluir la reunión, los fieles recibieron un papel con la foto y nombre de un seminarista del Seminario Diocesano de Autlán, con el propósito de que familias oren por él durante el resto del año; asimismo, se les otorgó una tarjeta con los datos bancarios de la institución, para quienes deseen donar en pro del seminario.
Edición: MV
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