Por: Claudia Irene Ortiz-Arrona | Entre ríos y riberas
Autlán de Navarro, Jalisco. 26 de julio de 2022. (Letra Fría) El llamado “Decenio de las Naciones Unidas sobre Restauración de los Ecosistemas” dio inicio de manera oficial el 5 de junio de 2021, en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, significa un esfuerzo a 10 años para detener y revertir el deterioro de los hábitats naturales (www.decadeonrestotion.org).
México se sumó a esta convocatoria lanzada por la ONU reconociendo y valorando la importancia de los ecosistemas saludables como condición para lograr el bienestar de todas las personas y sus comunidades.
Pero, ¿Qué es un ecosistema y cómo pueden restaurarse?
Un ecosistema es el conjunto de comunidades de plantas, animales, y microorganismos interactuando con su medio (clima, suelos, agua, etc.) presentes en un territorio determinado. Los seres humanos, somos una de las especies que habitamos e interactuamos de forma dinámica con esos ecosistemas (https://www.biodiversidad.gob.mx/ecosistemas/quees)
Los ecosistemas son cruciales para las sociedades humanas, ya que a través de los procesos y funciones ecosistémicas (interacciones físicas, químicas y biológicas de ecosistemas terrestres y acuáticos), se derivan servicios y beneficios de esencial importancia: agua, alimentos, y diversos recursos (medicinas, materiales de construcción, etc.) y proporcionan sustento básico para actividades productivas (Balvanera y Cotler, 2011). También brindan beneficios para todo el planeta, como la mitigación del cambio climático y la conservación de la biodiversidad.
México, gracias a su ubicación geográfica y a su diverso relieve, tiene una gran diversidad de ecosistemas, que van desde lo más alto de las montañas hasta los mares profundos, pasando por desiertos y arrecifes de coral, bosques, selvas y lagunas costeras.
La región Costa Sur y Sierra de Amula de Jalisco alberga varios de estos tipos de ecosistemas. Pero en las últimas décadas, la extracción destructiva de recursos y la transformación de ecosistemas en sistemas de producción intensiva de bienes los ha llevado al límite, modificando la capacidad que tienen estos ecosistemas para brindarnos servicios.
Hay mucho por hacer para cambiar la corriente destructiva ambiental en las regiones que habitamos.
Tomaré como ejemplo cuatro tipos de ecosistemas regionales para compartir algunas acciones que se puede realizar para restaurarlos. Precisamente, la restauración de ecosistemas son acciones encaminadas a la recuperación o mejora del estado de salud, o el buen estado ecológico, y con ello la capacidad de albergar su biodiversidad y el aporte de servicios y beneficios ambientales y socio-económicos (www.ser.org).
Tierras de cultivos agrícolas
El uso intensivo del suelo, la erosión y el exceso de fertilizantes y pesticidas están agotando muchas tierras de cultivo, y se ha demostrado graves impactos en la salud, incluso a nivel regional. Además, el nitrógeno de los fertilizantes utilizados en la agricultura (principalmente industrial) no solo contamina el aire, el suelo y el agua, sino que también contribuye al cambio climático.
Acciones para restaurarlos: algunas acciones incluyen la reducción de la labranza, el uso de fertilizantes y mecanismos de control de organismos no deseados (denominados “plagas”) más naturales, y la introducción de cultivos más diversos y uso de semillas nativas, incluidos los árboles.
Bosques
Para satisfacer el hambre de la humanidad por tierras y recursos, se destruyen bosques y selvas ininterrumpidamente.
La tala, la contaminación, las plagas invasoras y los incendios forestales sin manejo del fuego están dañando lo que queda. Los sistemas alimentarios son uno de los principales factores que afectan la pérdida de bosques.
Reconsiderar la forma en que las personas cultivan y consumen alimentos puede ayudar a reducir la presión sobre los bosques.
Acciones para restaurarlos: restaurar los ecosistemas forestales significa reducir la presión sobre los bosques para favorecer el crecimiento de forma natural, proteger y conservar aquellos bosques en buen estado de salud.
Las tierras de cultivo degradadas pueden ser ideales para la restauración forestal o agroforestal, según sea el objetivo. Alternativas como la creación de pequeños espacios boscosos inmersos en paisajes con tierras agrícolas productivas y asentamientos humanos.
Lagos y ríos
Disponer de agua suficiente, saludable, aceptable, físicamente accesible y asequible para su uso personal y doméstico es un derecho humano (Asamblea General de las Naciones Unidas: Resolución 64/292, 28 de julio de 2010).
Sin embargo, toda el agua proviene de los ecosistemas y los ecosistemas de agua dulce (ríos y lagos) se han degradado por la contaminación, la sobrepesca y la infraestructura, así como por la creciente extracción de agua para el riego, la industria y los hogares.
Acciones para restaurarlos: restaurar significa detener la contaminación, reducir y tratar los desechos, mejorar la gestión de la demanda de agua, recursos pesqueros y otros valiosos recursos naturales que provienen de estos ecosistemas acuáticos.
Recuperar la vegetación de las orillas de las riberas de ríos y lagos, crea hábitat para insectos que son alimento de muchos peces, entre otros muchos beneficios (ver Letra Fría 28.06.2022)
Zona Costera
Los ecosistemas costeros y marinos están siendo alterados por la contaminación, la sobreexplotación y el cambio climático, principalmente.
Acciones para restaurarlos: las amenazas que enfrentan estos ecosistemas requieren atención para alcanzar un aprovechamiento y manejo más sostenibles de la pesca y el uso de los manglares, desde el trabajo conjunto entre los gobiernos y las comunidades.
También, el tratamiento adecuado de las aguas residuales y otros desechos, así como evitar que la basura plástica ingrese a las costas y oceános, muchas veces arrastradas por las corrientes de los ríos.
Los arrecifes de coral, los manglares y los pastos marinos deben gestionarse con cuidado y restaurarse activamente para que los océanos sigan sustentando miles de millones de medios de vida en todo el mundo.
El pasto marino es un campeón climático oculto, ya que captura carbono hasta 35 veces más rápido que el bosque tropical.
Areas urbanas
El crecimiento de las ciudades y pueblos; casas, carreteras y fábricas, se va comiendo los espacios disponibles para los arboles y vegetación en general. Los desechos y la contaminación ponen en peligro las cauces de ríos y arroyos, los suelos y el aire.
Acciones para restaurarlos: las áreas urbanas tienen un enorme potencial de restauración.
Con acciones conjuntas de grupos de ciudadanos y de las autoridades municipales se pueden promover la limpieza de basura de cauces de arroyos locales, promover jardínes de plantas aptas para las abejas en sitios adecuados y crear bosques urbanos y otros hábitats de vida silvestre en parques, escuelas y otros espacios públicos.
Fuentes:
Balvanera,P., H. Cotler (2011). Los servicios ecosistémicos.CONABIO. Biodiversitas, 94:7-11.
Organización Naciones Unidas (Programa para el medio Ambiente). https://www.unep.org/es/noticias-y-reportajes/reportajes/restauracion-de-ecosistemas-guia-para-principiantes.
Sociedad para la Restauración Ecológica: https://www.ser.org/page/Resources.
CAC
