En esta columna hablaremos sobre la función social que cumplen las Reinas del Carnaval.
Desde el pasado sábado 2 de febrero con el entierro del mal humor se dio la bienvenida a otra emisión más del “Carnaval de Autlán”.
Ernesto Medina Lima en su libro Crónicas de la Grana, Jalisco menciona como antecedente el año de 1831 cuando el ayuntamiento otorga un permiso a un vecino de apellido Mardueño para llevar a cabo diez corridas de toros con la condición expresa de terminar el martes de carnaval. Sin embargo, Medina Lima (2000, p.59) también precisa que no se encuentra información, noticias o crónicas “pero la fiesta tal vez ya venía de muchos años atrás”. Lo cual quiere decir que nuestro Carnaval tiene mucha más edad de la que calculamos.
¿Cómo se eligen a las Reinas del Carnaval?
Dentro de esta festividad se lleva a cabo la elección de una reina; Medina Lima (2000, p.67) registra 1952 como el año en el que se instituyó oficialmente la elección anual de la reina del carnaval. Porque comenta que desde 1921 hasta 1951, solo hubo dos reinas.
Como lo conocemos hasta hoy dos jóvenes representan a dos gremios: Pollos y Choferes.
A excepción de un par de emisiones a partir del 2019 y 2020 en la que se tuvo la ocurrencia al amparo de la “innovación” de aumentar los gremios a nueve y convertir la elección de la ganadora a partir de un certamen para lo cual se realizó una convocatoria al estilo de los “concursos de belleza”.
Este intento de modificar la elección de las reinas no se continuó y para el 2022 regresaron los dos gremios y el mismo mecanismo de elección a través del cómputo y otorgando la corona a quien logre recabar el mayor número de votos -recursos económicos- en favor de alguna institución pública o privada, principalmente relacionadas con la educación, aunque también se ha beneficiado a la Cruz Roja, el asilo de ancianos, la casa hogar, entre otras instituciones.
Cabe hacer mención que la reina del año 2020 también lo fue durante el 2021 pues por la pandemia del COVID 19 se canceló el carnaval.
Su papel
Las reinas del carnaval sobre todo para Autlán muestran una faceta de la participación de la mujer en la vida pública, me parece importante pues la mayoría de las reinas del carnaval han sido en su mayoría mujeres autlenses, y cumplen una función social importante.
Son un referente no solo de la aspiración de las jóvenes por representar la identidad femenina de las mujeres de este municipio, también se convierten en un referente para las niñas pequeñas en las que pueden fomentar la seguridad de expresarse en público, participar de forma activa en una labor social y construir también a partir de ellas su identidad.
Uno de los desacuerdos que tuve cuando se trató de modificar esta tradición fue el contenido de la convocatoria pues me parecía entre otras cosas excluyente pero también descontextualizada, en una época en la que los certámenes de belleza están sufriendo cambios significativos, por ejemplo, la incursión de mujeres trans, la eliminación de una serie de condicionantes como el peso, la edad, entre otros, pues estos estereotipos de belleza no responden con las nuevas demandas sociales de las mujeres, pero además se desvirtúa el sentido de lo que ha sido la elección de las reinas; pues considero que no debe equipararse la elección de la reina del carnaval con un certamen de belleza pues tienen orígenes y objetivos diferentes.
El alcance de la tradición
El alcance de la tradición de las reinas del carnaval tal vez no ha sido analizado lo suficiente, sin embargo, al menos aquí en Autlán, las reinas son una tradición arraigada que da identidad a la fiesta y sobre todo incorpora a las jóvenes en esta festividad.
La figura de la reina del carnaval acompaña a las autoridades en la mayoría de los eventos, desde el desfile, la inauguración, las corridas formales, clausura, ruedas de prensa; es decir, su presencia es activa y valiosa, sin duda, las reinas del carnaval me atrevo a decirlo, son uno de los elementos más representativos de esta importante fiesta que ha perdurado ya por más de 70 años.
Considero que si hubiera el interés por rescatar la historia de cada una de las reinas se podría hacer un recuento de datos interesantes por ejemplo ¿las edades que tenían? ¿qué labor social realizaron? ¿cómo las eligieron? ¿a qué gremio representaron? ¿cuáles fueron sus experiencias? ¿qué recuerdos tienen de su participación? y muchísima información que estoy segura sería de gran valor.
En fin, se acerca un nuevo cómputo y se sumará a la historia del carnaval también otra reina más.
No me resta más que desearles a quienes viven de forma activa esta gran fiesta autlense que la disfruten, que lo hagan con moderación y responsabilidad, a los visitantes gocen de la hospitalidad de quienes habitamos este terruño y espero se lleven un grato recuerdo. Como siempre agradezco el favor de su lectura, los invito a dejar sus comentarios, y por último espero tengan un agradable día; nos encontraremos en la próxima columna.
